Por la vigésima fecha de la Liga Profesional, Boca rescató un punto frente a Lanús en la agonía del partido. En una de las últimas jugadas, Alan Varela habilitó a Pol Fernández y en la continuación, asistió a Darío Benedetto, quien no perdonó y anotó el 1-1 final.

El juez de línea levantó el banderín de manera inmediata pero, tiempo después, Fernando Echenique convalidó el gol con la asistencia del VAR. En la visita no se tomaron para nada bien este accionar de la terna arbitral y lanzaron todo tipo de quejas por esta jugada tan polémica.

A las horas de la finalización del duelo, los árbitros presentes en la cabina decidieron que el gol era válido porque “parecía el hombro pero tiraron la línea del defensor“. A dos días del enfrentamiento en La Bombonera, se dieron a conocer otros motivos que justifican su resolución.

Según la comunicación desde el VAR con el periodista Germán García Grova, hubo un inconveniente con el software. El jugador en cuestión es Pol Fernández y para tirar una “línea aérea” necesitan su aparición en cuatro cámaras, dos del offside y dos de la mitad de la cancha.

El volante solo aparecía en una lo que permitió trazar la línea del pie y, no la del hombro para realizar la toma aérea, algo que despertó sospechas en el Granate. En resumen, no se pudo comprobar si esa parte del cuerpo estaba en posición adelantada o no.