Transcurren los últimos días de febrero y Boca cierra el mes con una nueva alegría. Por la quinta fecha de la Liga Profesional, se llevó los tres puntos de Liniers tras vencer a Vélez por 2-1. Los goles de Luca Langoni y Nicolás Figal, dos de las figuras, fueron claves para cosechar su segundo triunfo al hilo.
Al igual que el partido en Córdoba frente a Talleres, el vigente campeón sufrió dos golpes en cuestión de minutos. Esta vez, con el penal anotado por Lucas Janson y la expulsión de Ezequiel Fernández.
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A minutos del final y muy cerca de repartir puntos en el José Amalfitani, el Xeneize se encontró con un tiro de esquina que derivó en el gol de la victoria. El cotejo ya había contado con algunos chispazos entre los jugadores y con el segundo gol, las emociones se incrementaron.
Luego de su conquista, el defensor lo celebró de cara a una de las tribunas del estadio lo que generó el enojo de los simpatizantes y jugadores del Fortín. Y con la discusión entre ambos equipos, el ex Inter Miami fue corriendo al banco de suplentes.
¿A qué fue? El zaguero se dirigió al sector donde se encontraban el DT y los demás integrantes de la delegación para festejar junto a Javier García con un abrazo. Tras el triunfo, Figal habló sobre esta celebración y soltó: “Estábamos hablando hoy que si hacía un gol, se lo dedicaba a él. La verdad que bueno, nos pusimos muy contentos los dos“.
