El uruguayo y el colombiano dejan el alma. Mirá el video y volvete loco.
En el medio del primer superclásico hubo una jugada que levantó a toda La Bombonera. No, no fue ni el gol de Ramón Ábila, ni el de Darío Benedetto: este episodio tiene como protagonistas a dos mediocampistas que no se guardan nada.
Primero fue Nahitan Nández, el uruguayo que en la zona de los palcos trabó ante Javier Pinola y mostró, una vez más, toda su entrega. Luego apareció Wilmar Barrios, quien cortó a Pity Martínez y le robó una pelota casi imposible. ¡No se guardan nada!
En la revancha, el Xeneize debe salir a jugarlo así, con dientes apretados, pierna fuerte y corazón caliente. La historia indica que en Boca puede faltar todo menos actitud. ¡Se puede!