Boca consiguió una gran cantidad de títulos en el plano internacional y uno de los últimos logros fue la obtención de la Recopa Sudamericana 2008. En aquella serie ante Arsenal de Sarandí, Damían Díaz era uno de los integrantes del plantel azul y oro. Tras su paso por el Xeneize, el volante continuó su carrera en otros países como en Ecuador y allí se convirtió en ídolo, vistiendo la camiseta de Barcelona de Guayaquil.

Luego de varios años en esta institución, el Kitu le puso punto final a esta etapa y decidió retornar al fútbol argentino. Según reveló el periodista César Luis Merlo, el exBoca se convirtió en nuevo refuerzo de Banfield y firmará contrato hasta diciembre de 2025, con chances de extenderlo por un año más. Además, mencionó que espera que el lunes empiece con los exámenes médicos.

¿Cómo le fue a Damián Díaz en Barcelona de Guayaquil?

A lo largo de su carrera como profesional, el Kitu vistió la camiseta de varios clubes y gran parte de su trayectoria la hizo en el fútbol ecuatoriano, vistiendo la camiseta de Barcelona de Guayaquil. En aquella institución, en la cual se convirtió en ídolo, vivió varias etapas y cosechó varios títulos.

En total, dio tres vueltas olímpicas y formó parte del plantel campeón de la Liga Pro Ecuador en 2012, 2016 y 2020. Otro de sus logros fue la participación en Copa Libertadores, llegando a semifinales en 2017 y 2021. Al no ser tenido en cuenta por Ariel Holan, su última etapa llegó a su fin y ahora iniciará un nuevo ciclo en Argentina, siendo su tercer club. Anteriormente, jugó en Boca y Rosario Central.

Los números de Damián Díaz en Boca

A sus 39 años, Díaz pasó por seis clubes en total y uno de ellos fue en el Xeneize. Tras sus inicios con la camiseta del Canalla, el Kitu llegó al cuadro de la Ribera a mediados de 2008, pero su continuidad no fue la esperada. Tan solo disputó siete partidos –tres como titular- entre torneos locales e internacionales.

Luego, continuó su carrera en otras instituciones y a mediados de 2009, fue cedido a Universidad Católica. Tras su regreso, no fue tenido en cuenta y se marchó nuevamente a préstamo, esta vez a Colón de Santa Fe. Finalmente, un año después se dio el tercer y última cesión. En 2011, se unió a Barcelona de Guayaquil y allí comenzó su historia en un club donde es muy querido.