Esta mañana, el plantel se dividió en dos grupos. Mientras algunos jugadores hacían fútbol en espacios reducidos, el resto practicaba definición. Luego, para estos últimos la actividad cambió: hubo un nuevo ejercicio.
Diego Markic y Mauro Navas fueron los encargados de explicarlo y ponerlo en marcha. El trabajo comienza con un salto y cabezazo. Después, el jugador recibe la pelota y debe meterla de aire en uno de los dos arcos chicos que tiene a sus lados.
El paso siguiente es “darle un pase” a una caja que está puesta en los costados, simulando una pared con un compañero, para finalizar con el remate al arco, cubierto primero pero los “jugadores inflables” y luego por el arquero de turno.
Al principio, a algunos jugadores les costó, y hasta hubo bromas para quienes erraron, pero de a poco fueron agarrándole la mano. El método Arruabarrena se sigue implementando.
Mirá un fragmento de cómo fue la actividad:
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