Borghi habló con los jugadores más importantes del plantel en el entrenamiento matutino. Los enganches trabajaron separados del resto.
Boca entrenó esta mañana, pensando Tigre, rival del próximo domingo. Con la idea de revertir el mal momento, Claudio Borghi sostuvo una charla con varios de los futbolistas más importantes del plantel, entre los que no estuvo considerado Clemente Rodríguez.
Cristian Lucchetti, Javier García, Christian Cellay, Matías Caruzzo, Juan Insaurralde, Sebastián Battaglia, Jesús Méndez, Juan Román Riquelme y Martín Palermo fueron los llamados a la “reunión”, que se extendió aproximadamente por diez minutos, mientras sus compañeros comenzaban los ejercicios. Casi todo lo dijo el Bichi, quien considera que son ellos los encargados de contagiar al resto para salir adelante, aunque los futbolistas aportaron algún que otro bocadillo.
Otro dato saliente de la práctica fue que los enganches (Riquelme, Marcelo Cañete, Damián Escudero y Leandro Paredes, joven promesa de las Inferiores) no trabajaron a la par del resto. Se vio a Román ensayando remates sin ninguna dificultad y, pese a que no hizo fútbol formal todavía, las posibilidades de que regresa ante Huracán, por la undécima jornada, se acrecientan.
Sobre el equipo para visitar a Tigre, Borghi dispondría la salida obligada de Clemente Rodríguez, sancionado, su lugar lo ocuparía Matías Giménez y el resto de la formación se mantendría en relación a los que perdieron contra Lanús.
Entonces, los once serían: Lucchetti; Gary Medel, Caruzzo, Insaurralde; Orlando Gaona Lugo, Battaglia, Jesús Méndez, Giménez; Marcelo Cañete; Viatri y Palermo.