Boca no logra acordar el pase del volante a Rosario Central y la negociación quedó en stand by. ¿Se queda o se va?
Luego de la caída de su pase a Cerro Porteño, Federico Carrizo continúa entrenando junto al plantel de Primera División. Aún así, Guillermo Barros Schelotto no lo tendrá en cuenta y es por eso que el volante busca arreglar su salida del club donde no logró rendir de la forma esperada.
Si bien no hay grandes ofertas, Rosario Central quiere repatriar al jugador del cual es dueño en un 40% del pase. El 60% restante le pertenece a Boca Juniors que pagó 2.700.000 de dólares por él en 2014.
El inconveniente surge porque el club de la Ribera quiere realizar la venta total del jugador mientras que el equipo santafesino busca un préstamo. El problema es que el contrato del jugador termina a fin de año y si se realiza el préstamo, tras 6 meses, se irá libre y no dejará dinero.
Boca, por su parte, busca recuperar una parte del dinero invertido hace dos años. ¿Empieza una nueva novela?