Año tras año se disputa la Copa Argentina y algunos clubes de Primera División suelen enfrentarse con otras instituciones del Ascenso. A comienzos de 2013, Boca se midió ante Excursionistas y más allá del resultado, Darío Carpintero protagonizó una de las jugadas del encuentro. Con el marcador en contra, el futbolista de Villero le cometió una durísima falta a Cristian Erbes, uno de los tantos futbolistas surgidos de las inferiores del club. 

En aquel triunfo del Xeneize en Chaco, el rival se llevó todas las luces tras una fuerte entrada al volante Xeneize. Y a más de 10 años de aquel suceso, recordó lo sucedido en una entrevista con Diario Olé y brindó más detalles: “A mí me pasó el teléfono Ale Fantino, que me llamó cuando llegué a Buenos Aires de Chaco. Después de la nota me pasó su celular, hablé y todo bien. Tanto él como su representante lo entendieron. No fue de mala leche, fue una jugada sin mala intención. Quedó buena relación, ya que no fue apropósito”

Imaginate que terminó el partido y cuando llegamos al hotel mis compañeros me decían que en las noticias titulaban: ‘Carpintero mandó al quirófano al Pichi Erbes’. Fuimos a caminar al centro y los hinchas de River me aplaudían y los de Boca me puteaban de arriba abajo. Era jodiendo, pero los de River me felicitaban: “Bien, bien, hay que matar a los bosteros”. Folclore del ascenso ja”, sumó Carpintero. 

Darío Carpintero recordó un episodio contra otra figura de Boca 

A lo largo de su carrera, Carpintero hizo toda su trayectoria en el Ascenso del fútbol argentino y en algunas ocasiones, enfrentó a clubes denominados “grandes”. En 2013 se enfrentó al Único Grande y allí protagonizó un duelo con Darío Cvitanich, uno de los tantos futbolistas que vistieron la azul y oro. 

Horacio Montemurro, ayudante de campo de Caruso Lombardi, en la charla con Lamadrid nos dijo: ‘Cada jugador cuando pique va a quedar el olor de su perfume y lo van a seguir oliendo como media hora después’. Y fue así. Lo marcaba a Cvitanich y después quedaba su olor. Eso me quedó grabado de la charla”, rememoró el ex defensor. 

El recuerdo de Carpintero con Cvitanich por Copa Argentina 

Terminó el partido y mis hijos querían su camiseta. Fui al vestuario a preguntarle cómo estaba porque hubo una jugada en la que le pegué justo en la garganta y tuvo que salir. Después cambiamos camisetas y la guardé en el botinero. Íbamos en el auto y me perfumó todo el coche“, prosiguió Carpintero.

Por último, cerró: “Al día siguiente le escribí y de paso le pregunté qué perfume usaba, jaja. Cuando me manda la foto, me di cuenta de que teníamos el mismo… Y yo no lo había comprado trucho eh, pero no sé si él se echaba medio frasco o qué, tal vez era la piel, pero a mí no me quedaba igual”