Bueno, ahora sí: Boca no puede dejar más puntos en el camino en el torneo local. El Xeneize todavía ganó, se encuentra de la mitad para abajo y complica cada vez más su clasificación a la Copa Libertadores del próximo año.
Miguel Ángel Russo sabe que necesita encontrar varias cosas para lograr un mejor funcionamiento colectivo, y una de ellas es diagramar una formación que empiece a salir casi de memoria.
El entrenador todavía no definió quiénes serán los 11 que enfrenten a Estudiantes de La Plata, pero sí tiene en mente una base conformada por varios futbolistas que se ganaron el puesto: Agustín Rossi, Marcos Rojo, Carlos Izquierdoz, Juan Ramírez, Cristian Pavón y Norberto Briasco.
Además, espera por Agustín Almendra, quien ya trabajó a la par del grupo y dejó atrás el esguince de tobillo que lo marginó de los últimos compromisos. Por su parte, Cristian Medina y Diego González están un escalón arriba de Esteban Rolón y Alan Varela.
Juegue quién juegue, el objetivo del Xeneize debe ser uno solo: aferrarse a una idea de juego, darle rodaje a ciertos nombres y dejar de caminar por el sendero de la irregularidad.