Boca jugó flojo y parecía que empataba pero apareció el enganche para darle el triunfo con un golazo. Fue 1-0 en Victoria, gracias al Diez.

El arranque fue parejo. Ambos equipos parecían estudiarse. La primera de peligro fue para el Xeneize: Acosta se animó y probó desde afuera, pero el palo le negó el gol.

Tigre respondió varias veces pero la de mayor peligro fue de Nahuelpán. El delantero quedó mano a mano con Orion, quien lo tapó y le impidió convertir.

El local terminó la primera parte mejor que Boca, pero aún así el conjunto azul y oro se las rebuscó para generar: Acosta desbordó y le tiro un centro por abajo a Riaño, pero el nueve no llegó a tocarla.

El complemento fue muy parecido. Como la tendencia no cambiaba, Bianchi decidió hacer cambios: Ledesma y Gigliotti reemplazaron a Erbes y Acosta, respectivamente. Más tarde ingresó Sánchez Miño por Colazo.

El encuentro perdió intensidad y no se vieron acciones de peligro. A Boca le costó ser vertical y llegar con profundidad. Pero apareció Riquelme: el enganche remató con calidad desde lejos y así convirtió un golazo para que Boca se lleve tres puntos de Victoria y así vuelva al triunfo. Cuando no había nada, ahí estuvo el Diez.

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