Agustín Orion defendió el arco de Boca y PBJ te trae, como cada partido, un análisis con sus intervenciones.
El partido de ayer por la noche fue casi sin exigencias para Orion. La poca profundidad de ambos equipos llevó a que el encuentro sea muy trabado en la mitad de la cancha, a tal punto que el arquero Xeneize se convirtió en un espectador durante la mayoría del juego.
Participó por primera vez tras un centro al área que despejó exigido por un jugador de Independiente, quien luego le cometió falta en ataque. Seguida a esta situación, volvió a aparecer nuevamente en un centro que rechazó con los puños. La pelota le quedó a Tuzzio pero el uno salió a achicar los espacios y el defensor de Independiente no pudo convertir.
Durante el segundo tiempo no tuvo trabajo más allá de un disparo de media distancia que controló sin problemas, hasta que llegó la jugada del gol.
El mal rechace de Franco Sosa hizo que el balón rebotara en Rolando Schiavi, que terminó convirtiendo en contra de su propia valla. El arquero, totalmente descolocado y sorprendido por esta jugada, no pudo reaccionar.
En síntesis: Noche tranquila para Agustín Orion. Siempre demuestra seguridad en los balones aéreos y no tuvo responsabilidad en el gol.