Tras una dura patada de Videla, a los pocos segundos de partido, el volante Xeneize sufrió un importante esguince de tobillo. Se espera el parte oficial.
Luego del duro golpe sufrido ante Racing, Pablo Pérez mostró signos de mucho dolor. Si bien pudo continuar, el volante se retiró del entrenamiento matutino con una bota ortopédica para realizarse estudios y determinar la gravedad de la lesión.
Lo que parecía ser un simple traumatismo, se convirtió en un duro esguince en el tobillo derecho que lo dejaría fuera del partido ante Aldosivi —de todas formas no podría jugar ya que llegó a la quinta amarilla— y ante Deportivo Cali por Copa.
Mucha preocupación para el cuerpo técnico de Boca que no sabe si podrá contar con el volante ante River para el Superclásico de la próxima semana.
