El traspié frente a Arabia Saudita parece haber quedado en el camino para la Selección Argentina que clasificó con las victorias ante México y Polonia. Ahora, el equipo dirigido por Lionel Scaloni dio otra muestra de carácter ante Australia y obtuvo el boleto a los cuartos de final donde lo espera Países Bajos.
Sin embargo, no todo es color de rosas. En el inicio del complemento, el DT sorprendió con un cambio que llamó la atención a más de uno. Apenas transcurrían algunos minutos y Lisandro Martínez ingresó al campo de juego en lugar de Alejandro Gómez.
Minutos más tarde, las cámaras lo enfocaron a “Papu” y allí aparecían indicios de una lesión que el propio futbolista confirmó minutos más tarde en declaraciones con TyC Sports.
“Me quería matar porque me doblé el tobillo feo y no podía seguir mucho más. Prefería que entre otro chico que esté mejor que yo. Es un esguince, quedan varios días para recuperar y va a estar todo bien“, soltó el futbolista de Sevilla.
Además de brindar algunos datos sobre su lesión, analizó el encuentro ante los “Socceroos”, principalmente el gol que generó cierto nerviosismo: “Cuando no terminás de cerrar el partido, un gol de la nada te puede complicar. Podríamos haber hecho varios goles después, pero lo importante es que se ganó, se terminó sufriendo pero somos Argentina: siempre hay que sufrir“.
