El mercado de pases le está siendo esquivo al Xeneize, que hasta ahora sumó una cara nueva. Conocé cómo sigue la mano.
“La plata fuerte la vamos a poner en junio”, manifestó Nicolás Burdisso, director deportivo, hace algunos meses atrás. Por ahora está quedando preso de sus palabras, ya que Boca no está realizando un buen mercado de pases y las negociaciones que parecían estar encaminadas, se complicaron.
La única cara nueva es la de Alexis Mac Allister, quien jugará a préstamo durante 12 meses con la camiseta azul y oro. El dato que no suma: en el vínculo que firmaron Boca y el Brighton inglés figura que no hay opción de compra disponible.
Lo de Maximiliano Meza parece imposible, lo de Eduardo Salvio se estancó y lo de Jan Hurtado por ahora está en stand by. Así está el panorama en el mundo Boca respecto a los refuerzos y tan solo faltan 19 días para el primer cruce de octavos ante Athletico Paranaense, en Curitiba, Brasil.
Gustavo Alfaro, algo resignado por la situación, sostuvo que “este será el plantel que juegue por la Libertadores” por eso se enfoca en potenciar a los futbolistas que trabajan en la pretemporada de Estados Unidos. Si llega algún otro, mejor; pero de lo contrario, la idea del entrenador es corregir los errores del pasado para que no se repitan a futuro.
Pese a estar ordenado económicamente y con balances que arrojan cifras históricas, el Xeneize padece la etapa de negociaciones y le cuesta mucho cerrar fichajes. ¿Lo padecerá a futuro?
