Pasaron apenas 20 días del golpazo que recibió Boca ante Alianza Lima en La Bombonera. La eliminación de la Copa Libertadores tiró a la lona al Xeneize, que se quedó por segundo año consecutivo sin participar del torneo continental en la fase de grupos.
Fernando Gago quedó en el ojo de la tormenta y su continuidad se puso en duda, al margen de sus declaraciones en conferencia de prensa. El entrenador, cuestionado por propios y extraños, pateó el tablero, debió cambiar su plan inicial para salir ileso de la zona de turbulencia. Por ahora, la cosa marcha mejor de lo imaginado.
Los tres motivos por los que Gago sigue siendo el DT de Boca
Respaldo de los jugadores. El partido contra Central en La Bombonera, la visita a Central Córdoba en Santiago del Estero y la goleada frente a Defensa de local, tres muestras claras de que el mensaje que baja Gago le llega al plantel. Al margen de lo ocurrido en la Libertadores, los futbolistas respaldaron al director técnico en el verde césped y ayudaron a que se sostenga en el cargo.
Esquema táctico más simple. Gago tuvo que cambiar él para que Boca cambie. Fernando, luego del fracaso en la Copa, reordenó todo y vio resultados en lo inmediato. Cuatro defensores, cuatro volantes y dos delanteros: así decidió jugar el DT y los resultados, al igual que el rendimiento, aparecieron. Todo en su lugar, la receta para sacar la cabeza de abajo del agua.
Confianza dirigencial. Puertas adentro siempre se dijo que la continuidad de Gago nunca estuvo en duda, ni siquiera después de la eliminación frente a Alianza Lima. Por lo tanto, hasta que no termine la participación de Boca en el Torneo Apertura no se tomará ninguna decisión contundente sobre el futuro del entrenador del Único Grande.
Ilusionado con lo que se le viene a Boca: Gago, respira.
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