Boca perdió ante Lanús y no solo empeoró sus estadísticas en condición de visitante y complicó aún más su situación en la tabla anual. También dejó otra pálida imagen futbolística que profundiza un problema que sufre y que, a estas alturas, es preocupante: se acostumbró a no ganar.

La exigencia histórica del club y salir a buscar los tres puntos en cada cancha sigue latente, pero no se expresa en el juego del equipo. Un gol le bastó al “Granate” para quedarse con la victoria y nunca se dio la reacción de los dirigidos por Fernando Gago ante ese golpe. Los minutos finales fueron la extensión de lo que se vio en los minutos previo. No tuvo ocasiones de empatarlo y tampoco inquietó o arrinconó al local.

Boca mira la tabla anual, pero las urgencias cambiaron

Mucho se especula con la chance de que Boca gane una determinada cantidad de partidos y pueda clasificar a la Copa Libertadores 2025. O con el hecho de que si Vélez sale campeón puede liberar un cupo. Pero, ¿Boca tienen que perder energías en eso? ¿O solo centrarse en intentar ganar? Con Gago aún no lo ha conseguido.

El último triunfo en los 90 minuto fue con Mariano Herron como DT interino, contra Argentinos Juniors en La Bombonera. Si bien desde que asumió intentó que su equipo sea protagonista, con sus planteos y con los trabajos en la semana, Gago aún no consiguió plasmarlo ni desde el resultado ni desde el juego.

Boca volvió a perder como visitante. (Getty)

Boca volvió a perder como visitante. (Getty)

Datos preocupantes

De los últimos 15 partidos, Boca solo ganó cuatro. Eso se paga caro en torneos que premian la regularidad. Por ese motivo la urgencia máxima de Boca es ganar, más allá del plan del entrenador de jugar mejor. El plantel y el cuerpo técnico deben remarcar los pocos aspectos positivas y sostenerlos para lo que queda del año. El 2024 puede, y debe, terminarse con una imagen mucho mejor.