En una entrevista con el diario Olé, el delantero aseguró que no le pesará usar la ‘9’ que dejó Martín Palermo, a quien también elogió.
Tuvo que esperar muchísimo para reemplazar a Palermo. Fue paciente. El Loco se retiró. El día en el que usará por primera vez la camiseta número ‘9’ está a la vuelta de la esquina. Y Lucas Viatri, el protagonista de esta histora, brindó una entrevista exclusiva con el Diario Olé, donde contó sus sensaciones acerca de esto:
“Es algo muy lindo. Porque es la 9 de Boca y por todo lo que hizo Martín, por la historia que hizo con este número”.
Sobre las responsabilidades que lo anterior significan, manifestó que no se siente presionado:
“No me tengo que presionar. Si no la meto, seguramente empezarán a decir que Viatri no hace goles. Pero eso no me va a hacer mejor ni peor”.
“No me va a pesar la responsabilidad. Lo más lindo que hay es la camiseta de Boca, muchos quieren ponérsela. Pero puede que para algunos sea difícil por lo que representa. No para mí, que soy hincha y estoy en el club desde chico”.
Lucas reconoció que su estilo no es tan parecido al de un nueve muy de área, como lo era Palermo, por ejemplo, y que siempre le gustó bajar para ayudar a sus compañeros:
“Siempre jugué igual, siempre me gustó salir del área, participar de la jugada, no quedarme quieto arriba, porque siento como que no ayudo a mis compañeros. Por eso me gusta salir tanto, correr, buscar, meterme donde está el juego”.
“Siento que cuando mis compañeros levantan la cabeza, estar parado quieto allá arriba y no moverme, es no ayudarlos. Me gusta bajar, picar, estar dentro del área”.
“Ahora que no está Palermo me piden que me quede más adentro del área”.
“No es que no es mi juego. Pero me siento inútil sólo dentro del área. Así que voy a intentar hacer lo que me pidan, pero siempre voy a bajar a jugar y participar. Me sentiría raro, pero vamos a tratar de hacerlo, y nada… Vamos a tratar”.
En cuanto a los goles que deberá convertir y a las exigencias con la que tendrá que vivir opinó:
“Al 9 se le exige. Pero no sólo al 9, sino a todos los delanteros”.
“Si el delantero no hace goles, se empieza a rumorear, a unos les gustará y a otros no. Yo tengo que vivir del gol. Pero si no viene, no hay que desesperarse. Como hacía Martín: estuvo diez fechas sin hacer goles y siempre se lo vio tranquilo, con el apoyo del técnico, de los dirigentes y de los compañeros. Y en los últimos partidos terminó convirtiendo”.
“Yo hice ocho en el torneo en el que salimos campeones, en el 2008. Eso de la cantidad se va viendo durante la competencia”.
Por último, ante la pregunta si romperá el récord de Palermo, sólo tuvo flores para decir sobre el Titán:
“Martín es único. Va a ser el máximo goleador de Boca de acá para toda la vida. Y no lo voy a pasar, siempre va a quedar arriba de todos”.
