
Agustín Orion, de buena actuación ante Colón, fue analizado por PBJ. Entrá y disfrutá de sus mejores intervenciones.
Fue un partido donde Orion participó mucho del juego. Tanto en pelotas bajas como aéreas y remates donde se tuvo que disfrazar de héroe.
En el principio del cotejo, contuvo balones aéreos con mucha seguridad imponiendo tranquilidad en el área de Boca.
A mediados del primer tiempo tuvo una excelente respuesta ante Prédiger que sacó un zurdazo letal que era gol sin dudarlo. El uno con gran despegue de piernas alcanzó a desviar esa pelota de un manotazo que luego pegó en el palo y fue rechaza por la defensa.
Como mencionamos antes, también jugo demasiado con los pies y fue con complicaciones. Los defensores trataron de asegurar con él y, por la presión del rival, obligaban a Orion a dar pelotazos sin buena dirección. También, en algunos casos, recibió malas entregas de sus jugadores y esforzadamente trató de hacer lo mejor aunque no salió siempre.
En el segundo tiempo fue amonestado en una jugada por demorar. El guardavalla parecía no entenderle al árbitro y éste, lo sancionó.
Luego, tras una jugada que casi termina en gol de Colón, sufrió una especie de calambre, pero por suerte no pasó a mayores.
Se avivó en varias ocasiones en el complemento. Cuando capturaba las pelotas en el aire, embolsaba y aseguraba la pelota tirándose al suelo y además, aprovechaba a que el tiempo siga corriendo.
Por último, sobre el final del partido, tras una jugada entre cabezazos de los delanteros y dudas en la defensa, quedó Mugni mano a mano con Orion que salvó al equipo tapando esa pelota con sus piernas y luego de rebotes, la aseguró. Sin dudas, una de las claves para mantener el resultado y que Boca sea el único líder del Torneo Clausura.
En síntesis: Gran respuesta en remates y balones aéreos. El juego con los pies fue su punto débil en el partido.