El uruguayo, que marcó el primero de la goleada ante el Pincha, se mostró feliz por sacarse la mufa y muy conforme con el rendimiento del equipo. “Me tocó convertir, pero se ganó un partido muy difícil”, aseguró.
Después de tanto lucharla, un día se le terminó dando. Esta tarde Santiago Silva por fin pudo gritar su primer tanto desde que llegó al Mundo Boca. Y lo hizo, nada más y nada menos, que contra Estudiantes de La Plata, clásico de Gimnasia Y Esgrima, club donde el delantero tuvo paso durante 2006 y 2007.
En primer lugar, en diálogo con la prensa, contó sus sensaciones tras su primer gol con la camiseta azul y oro:
“Estaba tranquilo a pesar que lo buscaba, no me tocaba meterla y sí me tocaba asistir. Hoy por suerte me tocó”.
“Me tocó convertir, pero estoy contento porque se ganó un partido muy difícil contra un rival difícil”.
Sin embargo, el uruguayo se fue muy conforme con la actuación general del equipo:
“Hoy Boca jugó muy bien al fútbol, con la pelota contra el piso, frente a un gran rival”.
Y por último mostró su satisfacción por todo el cariño que le brinda la gente de Boca:
“Estoy muy tranquilo porque la gente me da toda la confianza en la cancha”.
