
Desde que llegó a Boca, el “Mellizo” nunca pudo poner una misma formación de manera consecutiva. Las últimas tres veces hubo un motivo en común: lesiones.
Guillermo Barros Schelotto lleva dirigidos 44 partidos oficiales en Boca, de los cuales ganó 22, perdió nueve y empató en 22 oportunidades. El balance es positivo: su equipo marcha puntero, es uno de los más goleadores y tiene una de las vallas menos vencidas. Sin embargo, como dice el popular dicho, la felicidad no es completa…
Desde que se puso el buzo de entrenador, el “Mellizo” no pudo repetir una misma formación de manera consecutiva. Rendimientos irregulares, suspensiones y lesiones le impidieron al oriundo de La Plata pensar en un equipo de memoria. En los últimos tres casos, los problemas físicos fueron el común denominador: Sara (baja ante River); Gago (out vs. Defensa y Justicia) y Seba Pérez (descartado frente a Vélez).
Sin dudas, un verdadero karma para Barros Schelotto y todo su cuerpo técnico. ¿Se cortará el maleficio la próxima semana?