
Los jugadores que no viajaron a Chaco para el Superclásico de esta noche se entrenaron con absoluta normalidad. Enterate qué pasó hoy en Casa Amarilla.
El día llegó. Después de mucho tiempo, Boca y River se verán otra vez las caras. No importa que el de hoy sea un partido amistoso. Para algunos la dignidad está en juego, para otros no tanto. Y esa sensación hizo que las llegadas de ambos equipos generara mucha euforia en la provincia de Chaco. Mientras tanto, en Casa Amarilla, los jugadores que no viajaron a disputar el match se entrenaron como cualquier otro día normal.
Los trabajos comenzaron desde muy temprano, alrededor de las 9.30, en el gimnasio del Complejo Pedro Pompilio y luego fueron todos para la cancha principal del predio. Entre las figuritas más importantes, se destacó la presencia de Juan Román Riquelme, Clemente Rodríguez, Walter Erviti, Santiago Silva, Diego Rivero y Darío Cvitanich. Junto a ellos estuvieron algunos jugadores de la Reserva.
Hubo fútbol en espacios reducidos, dónde se pudo ver al diez moviéndose con botines y sin inconvenientes junto a Silva y Erviti. En cambio para Clemente, quien tiene una fatiga en el isquiotibial izquierdo, hubo trabajos físicos durante toda la mañana.
El día se cerró con ejercicios de conducción de pelota con velocidad y luego se practicó definición, en donde todos le patearon a Sebastián D’Angelo, hoy tercer arquero del equipo. Tanto Rivero (con molestias en su rodilla) y Cvitanich no participaron de esto último por precaución.
El plantel ya entero, los demás regresarán tras el Super de esta noche, se reencontrará para practicar mañana en el horario de siempre.