Martín Palermo, el máximo artillero de la historia de Boca, ha hecho goles de cualquier manera: de zurda, de derecha, de cabeza, por encima del arquero y ¡hasta pateando con los dos pies!
El Titán siempre se las ingeniaba para mandar la pelota al fondo de la red y hacer delirar a la hinchada xeneize, que un 24 de abril de 1999 vivió otra locura más del Titán. Aquel día, Boca visitaba a Platense en cancha de Vélez y el eterno número 9 se hizo cargo de un penal que entró en los libros.
¿Qué pasó? Palermo tomó carrera, llegó hasta el balón y en el momento justo de impactar se resbaló y le pegó con la zurda y la derecha al mismo tiempo. Por supuesto, el final de la película terminó como casi siempre: gol de Boca.
La jugada llegó hasta los tribunales de la FIFA que, después de algunos debates reglamentarios, terminó dando por válido el gol del Loco. Hoy, después de 22 años, el Xeneize vuelve a medirse contra el Calamar y la memoria se va, automáticamente, a aquella noche lluviosa en Liniers. Recordar es vivir.
Así fue el penal de Palermo a Platense:
