
En diálogo con La Red, el volante se mostró confiado en poder mejorar su nivel de cara al Apertura. “Quiero demostrar que puedo jugar con esta camiseta”, agregó.
Durante el torneo pasado, Walter Erviti fue una sombra de aquel futbolista que vistió la camiseta de Banfield. La falta de una buena pretemporada, la adaptación al equipo y el jugar en una posición en la que no estaba acostumbrado parecen ser los tres justificativos más fuertes.
En su último día en Curitiba, el zurdo hizo un balance de los trabajos realizados en el complejo de Atlético Paranaense:
“Hemos trabajado muy bien, con muchas ganas, conscientes de lo que significa este semestre para Boca. Tantos días juntos viéndonos la cara ya en un momento cansa”.
Por el esquema que utiliza el conjunto Xeneize, Erviti deberá ocupar el sector izquierdo del mediocampo. Ese lugar no es del todo cómodo para el marplatense:
“Uno tiene que adaptarse al equipo. Si no hago eso, no voy a tener lugar. El técnico ha decidido parar un esquema distinto al que yo jugaba antes, por eso estoy tratando de competir por un puesto con otros compañeros. Por ahora le estoy dando prioridad a la parte física”.
“Yo estoy tranquilo, sé lo que el técnico quiere. Estoy tratando de demostrar que lo puedo hacer, eso no quiere decir que lo vaya a lograr. Es una posición en la que hace mucho tiempo no juego y ya me había acostumbrado a tener otra importancia adentro del equipo, pero lo voy a intentar”.
El volante expresó que lo que más le cuesta es aceptar la pérdida de protagonismo adentro de la cancha:
“Me estoy preparando sobre todo en lo mental, sabiendo que la participación que puedo tener adentro del equipo no es tan importante o determinante como lo era antes”.
Igualmente, agregó que lo que más lo empuja a hacer la adaptación sobre el carril izquierdo son las ganas de poder vestir la camiseta azul y oro:
“Yo tengo muchas ganas de poder jugar al fútbol y demostrar que puedo jugar en Boca. Eso es lo que más me motiva a intentarlo, por más que está claro que yo quisiera jugar en otra posición. Si hoy me toca hacerlo acá, trabajaré con mucho esfuerzo para darle al equipo lo que necesita de mí”.
“Estoy feliz de estar en Boca. Realmente lo quería, lo deseaba”.
Dedicó un párrafo aparte para Falcioni, con el que habló acerca de su posición en la cancha:
“Con el cariño y el respeto que le tengo al técnico nunca voy a hacer una declaración en contra suya. Antes de terminar el torneo, Julio habló conmigo mano a mano y nos dijimos las cosas que sentíamos. Cuando la prioridad siempre es el equipo, esas cosas hacen bien”.
Sobre el cierre, advirtió que el equipo no puede “dormirse” luego de ver lo que le pasó a River:
“Boca está en una situación incómoda, que no es buena para ninguno. No podemos dudar ni tambalear porque ha quedado demostrado con otros equipos grandes que todo puede pasar”.