“Uno se pone en el lugar de los jugadores de River. En otras canchas también nos ha pasado a nosotros: nos tiraron piedras, le abrieron la cabeza a Orion. En todas las canchas pasa y está mal”.
“El árbitro nos decía que la decisión la tenía que tomar la Conmebol. Y el veedor de la Conmebol decía lo contrario. El operativo fue un desastre en general”.
“Nosotros, los jugadores de Boca, quedamos expuestos adentro de campo. ¿Pero era tan difícil que manden 100 policías a la platea de Boca para sacar a la gente y que los jugadores pudieran salir?”. “No nos sentimos culpables de nada. El árbitro nos decía a cada rato que el partido se iba a jugar. Yo creo que no se tendría que haber seguido jugando por cómo estaban los jugadores de River“.
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“El saludo fue para toda la gente. Tenemos que crucificar a la gente que encabezó a los disturbios y no a todos“.
