Boca ganaba 3-1, Vélez lo dio vuelta pero todo terminó en empate 4-4. Palermo erró un penal, pero luego convirtió el tanto para llegar a los 218 y ¡RECORD!.
Vélez sabía de la importancia de este partido y pidió el artículo 225, para que Moralez pueda jugar por la ausencia de Otamendi, citado para la selección nacional. El enganche se encargó de mover los hilos de un equipo vertiginoso que salió a llevarse por delante a su rival.
Los de Gareca eran una tromba y Boca solo conseguía tibias llegadas, como un cabezazo de Gaitán que sacó Montoya al córner. El local consiguió la apertura tras un centro de Cabrera y posterior testazo de Zapata, un ex – River.
Riquelme sacó rápido un tiro libre y combinó con Gaitán, que se dejó caer en el área tras un agarrón de Lima. El árbitro cobró penal y Palermo agarró la pelota. El remate del delantero lo contuvo Montoya y así se perdía la chance de alcanzar el record de Cherro. Pero el fútbol siempre da revancha.
A los 36 minutos, Monzón se encontró con una mala salida de Domínguez y, con un zapatazo terrible, venció al arquero velezano. Tan sólo 3 minutos más tarde, Chávez y Riquelme se juntaron y el diez asistió a Palermo, que definió con grandeza ante el achique de Montoya. Martín llegó a 218, el RECORD. Ahora, va por más.
Con unos pocos destellos, Boca alcanzaba ponerse en ventaja y mostraba una mejoría en el juego. Los primeros minutos de la segunda etapa, mostraron lo mejor del visitante en el partido: a los 11 minutos, una combinación entre Chávez, Palermo y Riquelme, terminó en el golazo de Gaitán.
Ahí, terminó el gran pasaje del equipo de Alves en el encuentro y comenzó el sufrimiento. Excelentes tapadas de García evitaban una y otra vez la caída del arco Xeneize, hasta que Silva logró quebrarla, tras un pase de Martínez, recién ingresado.
Vélez siguió yendo al ataque y empujaba a su rival, que para peor fortuna, contó con la lesión de Palermo. Contractura en el recto posterior de la pierna izquierda y Viatri a la cancha. El arquero de Boca seguía tapando pelotas increíbles, pero no pudo con un remate fuerte y abajo al palo izquierdo de Martínez.
A los 37, la peor noticia: Silva le ganó la espalda a Luiz Alberto y marcó el cuarto. Vélez aprovechó que 10 de sus 11 jugadores no habían estado presentes en la fecha anterior y sacó ventaja con la diferencia física.
Parecían escaparse los tres puntos para los Xeneizes, cuando Monzón sacó un fortísimo remate y, tras el rebote de Montoya, Medel pudo convertir la igualdad definitiva.
Los de Liniers manejaron el partido y Boca, que pudo liquidarlo con el partido 3-1, golpeó en los momentos justos, a pesar de que Palermo falló el penal. Se pudo ganar, se pudo perder, se empató. La realidad es que se sumó un punto y ahora, a pensar en Racing.
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