
Carlos Bianchi quiere repetir sus campañas anteriores en la Copa Libertadores. Otra vez quiere llegar a la final y repetir lo que ya logró cuatro veces (tres en Boca y una en Vélez): la consagración. Es el objetivo, y tras el 0 a 0 de local, el entrenador fue cauteloso y analizó el partido contra Newell’s:
“En el primer tiempo hicimos un gran esfuerzo físico para quitarle el balón a Newell’s que lo maneja muy bien y quizá en el segundo lo sentimos un poco”.
“Si decimos que cada equipo tuvo sus tiempos, fue más categórico nuestro tiempo bueno que el de ellos”.
“En peligrosidad, estuvimos más cerca que ellos”.
“Tuvimos nuestras chances que no pudimos concretar. Estamos jugando contra el primero del campeonato y es un equipo que hay que respetar. Se nos complicó a la hora de la definición”.
“Convertir es lo más difícil que hay. De 37 partidos que jugó Scocco (delantero de Newell’s) hizo 26 goles, es un promedio extraordinario”:
“El equipo está manteniendo el cero, que era una de las grandes críticas que nos hacían. Es importante”.
Se mostró contento porque sus dirigidos levantaron el nivel, aunque recalcó que todavía hace falta mejorar más:
“De a poco el equipo se va asentando y tratando de jugar como lo pretendemos, sabiendo muy bien que de la noche a la mañana no se pude armar un equipo”.
“Nosotros estamos jugando mejor que lo que hemos hecho al principio”.
“Me gustaría jugar los noventa minutos como lo hicimos el primer tiempo de hoy y de Corinthians en Brasil. Pero nos enfrentamos también a dos grandes equipos. Tuvimos nuestro momento y no lo pudimos aprovechar y en el segundo tiempo Newell’s fue mejor”.
“Cuando hay un equipo que tiene cierta continuidad es más fácil encontrar un estilo. Nosotros no pudimos hacerlo porque tuvimos que cambiar el equipo”.
Sobre el partido de vuelta, que se jugará el miércoles en Rosario, destacó:
“Faltan 90 minutos y hay que ir a jugarlos con la idea de que las posibilidades están para poder pasar. Espero un partido de mucha intensidad y mucho ritmo”.
Explicó por qué Juan Román Riquelme jugó los noventa minutos:
“Uno de Román siempre espera que puede llegar a inventar algo y al final hubo algunos balones que con un poco de suerte hubiera dejado compañeros mano a mano con el arquero. Tiene la claridad que no tienen los otros y por eso lo dejé hasta el final, aunque obviamente es complicado cuando recién vuelve de la lesión y no está al cien por ciento físicamente”.
Por último, en cuanto al rumor que señala que podría no viajar a Rosario para el encuentro ante el mismo rival por el Torneo Final, que se jugará el domingo a las 21.30, destacó:
“Si tengo que ir a Rosario iré, si no me quedaré con los que van a jugar el miércoles la revancha. Uno tiene que ver dónde es más útil”.