El coordinador general del fútbol juvenil en Boca Juniors fue entrevistado por la revista Solo Boca, contando su trabajo en el club.
Ser encargado de las divisiones inferiores es una tarea para nada fácil, y mucho menos de una institución tan importante como la Xeneize. Por esto mismo José se encarga de contar su trabajo para esta publicación.
Primeramente cuenta el estado de las inferiores hoy en día:
“Permanentemente salen y se venden jugadores, aunque últimamente cuesta más encontrar chicos con condiciones. Hoy ya no hay tantos como antes”.
“Antes, los pibes salían del colegio y tiraban el guardapolvo para ir a jugar a la pelota, en cambio hoy se ponen con la informática. No quiero decir que esta época sea mejor o peor, digo que es diferente”.
Sobre los directores técnicos:
“Deben tener en claro qué es lo que quieren, no nos sirve tener dirigiendo a alguien que está con la cabeza apuntando entrenar la Primera División”.
Se refirió a si es importante probar a todos los chicos sin importar los resultados deportivos o lograr buenas campañas:
“El entrenador debe mirar a todos, es cierto, aunque también tiene que encontrar la formación ideal. En la cancha hay que poner lo mejor, eso está claro. Pero es obvio que también hay que encontrar el momento para darle la chance al resto”.
Agregó sobre si es importante o no ganar un torneo:
“Lo que nosotros queremos es que los chicos se preparen, que progresen y que lleguen a Primera División”.
“Si todo esto viene acompañado de un título, mucho mejor para ellos, porque se consolidan más. Si los chicos no tienen un incentivo por el cual jugar… no hay sentido”.
“Hay que enseñarles a ganar pero que no se convierta en una necesidad”.
Elogió a Griffa:
“Jorge es una persona de consulta permanente y simplifica mucho el trabajo de todos. Le ha dado mucho al fútbol de Boca, y tenerlo nuevamente con nosotros es muy importante”.
Por otra parte, el coordinador piensa que terminan siendo psicólogos sin título:
“De tanto hablarles y formarlos, terminas siendo un poco el psicólogo de los chicos. No soy un experto en esa rama porque no estudié, pero esta profesión te da muchos conocimientos”.
“Cuando veo que un joven no tiene la misma cara de siempre, me arrimo a preguntarle qué le pasó, trato de aconsejarlo y al final terminás siendo un terapeuta para él”.
Cuenta como maneja a los chicos que tienen poca chances de jugar:
“El que no tiene la chance de ser titular sufre el doble”.
“Hay chicos que piensan que el técnico es el enemigo, entonces nosotros debemos explicarles que no es así, que trabajamos para ellos. Después terminan encariñándose con nosotros”.
“Cuando llegan a la casa tienen que escuchar a sus padres, a sus tíos, a sus abuelos que le dicen cosas acerca de su carrera. Sería bueno organizar una reunión con los padres y contarles de qué se trata todo esto, pero es difícil concentrar a todos en un solo lugar”.
Por último contó la mentalidad de los chicos de hoy:
“Cuando hacemos pruebas nos encontramos con un gran dilema: Vienen dos arqueros, dos marcadores de punta y tal vez un central, pero después está lleno de volantes, enganches y delanteros. Si les preguntás cómo juega un enganche, no saben qué decirte”.
Estas fueron las palabras de un especialista como lo es José Malleo, quién día a día hace un trabajo que da sus frutos en el futuro.