En el partido ante Godoy Cruz, Carlos Bianchi debió improvisar en la línea defensiva. Dos habituales centrales fueron marcadores de punta, y por las bandas fue donde más lastimó el “Tomba” a Boca.
Es que las constantes lesiones obligan al DT a tomar rápidas decisiones. No poder contar con los jugadores de cada puesto complica la labor del “Virrey”. Las bajas de Emanuel Insúa y Leandro Marín son dos de las que más se sienten.
Ambos laterales avanzaron un paso más en su recuperación hoy en Casa Amarilla. Se los vio trotar por el perímetro de la cancha principal. El que se desempeña por la banda izquierda padece una lumbalgia. El del sector derecho tiene una luxación en el hombro.
Si bien su regreso está más cerca, hay que decir que todavía falta tiempo: recién el próximo mes se reintegrarán al grupo. Y Marín no podrá jugar hasta el año que viene. Mientras tanto, Bianchi debe improvisar.
