El volante no se olvidó de su amigo, a quien también le adjudicó el triunfo del título obtenido. “Que sea feliz”, le deseó. Luego de la obtención de la estrella número 52 en la historia del club, Pablo Ledesma se mostró algo emocionado y quebrantado cuando se tuvo el bonito gesto de acordarse de Juan Román Riquelme:
“Quiero dedicarle esta Copa a un amigo que no está, Román”. “Él también contribuyó con esto, se lo extraña mucho y es tan merecedor como nosotros”. “La camiseta se la prometí ayer. Esta va para él, que es como mi hermano. Que sea feliz”.
“Se ganó con orden, con tranquilidad e inteligencia. Igual no sólo esta noche, esto fue un recorrido largo”.
“Merecíamos esta alegría. Acá en Boca no se merece, acá se gana y todo lo que se llega a pelear se debe ganar. Así me enseñaron desde chiquito y hoy estoy muy contento de cumplir el objetivo”. “Estamos acostumbrados que esto sea así. Para nosotros son lindos desafíos“.
