Finalizada la fase de grupos, Argentina ya comenzará a disputar otro Mundial. Después del duro traspié ante Arabia Saudita, supo reponerse y de manera rápida frente a México y Polonia. Ubicándose en el primer lugar del Grupo C, ahora llegará el momento de disputar los famosos “mano a mano” y el primero será contra Australia.
72 horas después del encuentro ante los polacos, la Albiceleste jugará su partido por los octavos de final y para este duelo trascendental, Lionel Scaloni tiene el equipo casi definido. La única duda se torna en relación al reemplazante de Ángel Di María, quien está con un pie y medio afuera de este partido.
Finalmente, “Fideo” no tiene una lesión muscular de gravedad y sólo sufrió una sobrecarga en el cuádriceps. Pese a sus intenciones de estar, el entrenador optará por resguardarlo. Con los tiempos entre un partido y otro, el DT pudo tener tan solo un entrenamiento y allí probó a varios jugadores para sustituir al futbolista de Juventus, que se entrenó de manera diferenciada.
A horas del cotejo, Gastón Edul informó que en primera medida, el DT prefirió respetar el esquema y allí aparecieron dos opciones: Ángel Correa y “Papu” Gómez, quien después del debut no sumó minutos. Y como alternativa, armó un 4-4-2 con el ingreso de Leandro Paredes, táctica que se vio en el segundo tiempo ante Polonia.
Cabe destacar que este último sistema y el ingreso de Paredes podrían aplicarse en el desarrollo del cotejo, utilizándose para cuidar el resultado. Dado que desde el CT presumen que Australia utilizaría un método similar al que efectuó Robert Lewandowski y compañía, cediendo la pelota y apostando por el contraataque.