Russo se refirió a las fuertes críticas al equipo y puso el pecho, defendiendo a sus jugadores. Repasá sus dichos.
Boca consiguió un nuevo título local tras derrotar por penales a Banfield, en San Juan y el equipo estalló de alegría. Buscando olvidar, por lo menos por un rato, lo ocurrido en la Copa Libertadores de América, el plantel se desahogó y festejó la estrella número 70 para la institución. Y allí, entre los saltos y cánticos, estaba Miguel Ángel Russo.
El entrenador no dialogó en conferencia de prensa pero sí charló con los medios desde el campo de juego. Mientras el plantel celebraba, el DT no dejaba de mostrar el orgullo que sentía por sus dirigidos, la bronca ante las críticas y la emoción por lo vivido en estos últimos días.
“Agradecerle a los jugadores, al cuerpo técnico y a la gente de Boca. Es el título 70 de la historia. Para nosotros es importante, seguro cometemos errores, hacemos autocrítica. Sabemos las situaciones, hablamos mucho, no es fácil levantarse después del otro día”.
“La gran mayoría está de vacaciones y nosotros jugamos la final. Algo tenemos, algo hacemos bien. Esa es la realidad, llegamos a esta instancia en un torneo donde costó mucho. La fase de grupos fue de la muerte. Nos tocó un clásico después de una semifinal, lo empatamos con uno menos, son cosas importantes. Nos falta la gente, hubiese llenado todo”.
Cuando volvieron a preguntarle sobre el partido disputado frente a Santos, en Brasil, no quiso hablar mucho más de lo que dijo en su momento. Aún así, cuando los periodistas insistieron en culpar la falta de actitud por parte del plantel, volvió a poner el pecho.
“Soy el culpable, me hago cargo de todo como corresponde. La realidad es que cuesta mucho llegar, nos exigen y siempre tratamos de estar un paso más, estamos en busca de eso. Es un reconocimiento lo de hoy, en un año difícil con pandemia. Santos ya es una historia, yo asumo el error y eso es suficiente”.
Por último, como mensaje para los medios de comunicación, Miguel sentenció:
“En Boca sé que todo es poco, soy el primero, estoy tranquilo sabiendo lo que hay que enfrentar y hacer. Del periodismo no digo nada, cada uno es dueño de hacer y decir las cosas como quiere. Entiendo lo que es Boca, una hormiga es un elefante. Puertas afuera es una cosa, puertas adentro otra”.
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