Repasamos la carrera del ídolo en el Xeneize, desde su primera ovación en su debut hasta la finalización de su vínculo con el club de la Ribera.

DESDE TORCUATO EN UN PAQUETE

Un 24 de junio de 1978 nació Juan Román Riquelme. Desde pequeño dio sus primeros pasos futbolísticos en clubes barriales donde ya destacaba por encima de sus compañeros. Tal así, que Argentinos Juniors posó sus ojos sobre él y se lo llevó para que empiece a vestir la camiseta del “Bicho”.

En 1996, Boca Juniors padecía una crisis en las divisiones inferiores donde no había jugadores del nivel adecuado, por lo que Carlos Salvador Bilardo, entrenador Xeneize en aquel entonces, aconsejó al presidente Mauricio Macri la compra de varios jóvenes del “Bicho”. Fabricio Coloccini, Pablo Islas, César La Paglia, Carlos Marinelli, Emmanuel Ruiz y Juan Román Riquelme llegaron en un combo por 800.000 dólares al conjunto de la Ribera. En aquel entonces, esa cifra pareció elevada porque ninguno de ellos había tenido minutos en Primera. Sin embargo, poco tiempo después, se demostró que fue una gran inversión. Un dato no menor, era que Román no era uno de los más destacados de aquel paquete, sino que era La Paglia.

10 de noviembre de 1996, una fecha que el enganche jamás olvidará en su vida. El Xeneize recibía a Unión de Santa Fe con Riquelme de titular. Su actuación fue brillante, demostrando su habilidad con la pelota, asistiendo a Fernando Cáceres en el segundo tanto del equipo y recibiendo su primera ovación. Con tan solo 18 años y menos de 90 minutos en Primera, Román ya recibía el afecto de la gente.

EL LEGADO DE MARADONA Y SUS PRIMEROS TÍTULOS

Dos encuentros después a su glorioso debut, Riquelme anotaría su primer gol, fue ante Huracán, tras un potente derechazo. Pese a que sus primeras intervenciones fueron mas que positivas, Bilardo y su sucesor, Héctor Veira empezaron a utilizarlo por la banda, obligandolo a cumplir funciones de marca, cosa que no eran del gusto del oriundo de San Fernando.

El 25 de octubre se produciría un hecho histórico. Boca Juniors se enfrentaba a River Plate en el Monumental. En el entretiempo, tras ir perdiendo 1 a 0, Diego Armando Maradona le manifestó al “Bambino” ser reemplazado por Riquelme y que Claudio Caniggia lo haga en lugar de Nelson Vivas. El Xeneize dio vuelta el marcador en la segunda parte, llevándose la victoria por 2 a 1. Días después, Maradona anunciaría su retiro del fútbol profesional.

Para el Torneo Apertura de 1998, Mauricio Macri decidió que Carlos Bianchi sería el nuevo director técnico del equipo. Sin dudarlo, el “Virrey” le dio la 10 y la obligación de ser el líder futbolístico de Boca a Riquelme. Aquel campeonato, fue para el Xeneize, que terminó invicto y con el enganche entre las máximas figuras. En el Clausura 99, los de la Ribera lograrían el bicampeonato y un record de 40 partidos sin perder.

MAGIA INTERNACIONAL

El año 2000 fue especial para Boca Juniors y para Juan Román Riquelme. Jugó su primera Copa Libertadores, en la cual fue figura y pudo levantarla ante Palmeiras. Antes, se había cruzado en Cuartos de Final con River Plate, el Xeneize lo eliminó y Román estampó uno de los caños más recordados ante Mario Yepes.

A fines de aquel año, el Xeneize se mediría en Japón ante el Real Madrid, que llegaba con Luis Figo como el mejor jugador del momento. Esto no le peso a aquel equipo de Carlos Bianchi, que supo vencer al “Merengue” con dos goles de Martín Palermo y las miradas de todos los espectadores se la terminaron llevandos los jugadores con la camiseta azul y oro.

Al retorno a Argentina, Boca no tenía descanso y definía el Apertura ante Estudiantes de La Plata. 1 a 0 y La Boca seguía de fiesta. Riquelme ya no era una promesa, sino una realidad.

SU PRIMER ADIÓS

Las chances de que Riquelme emigren eran latentes. En el Clausura 2001, Boca golea 3 a 0 a River Plate y el enganche festeja su gol con un topo gigio que quedó inmortalizado en la historia. Además, los éxitos siguieron, ya que el Xeneize era bicampeón de América.

Luego viene la derrota ante Bayern Munich en Japón. Esta vez no se pudo repetir lo que se hizo ante Real Madrid. Días después, Carlos Bianchi terminaba su contrato y no continuaría en el Xeneize. Seis meses después, Román también se iría, aunque a España, precisamente Barcelona.

CUATRO MESES MÁGICOS

Año 2007. El conjunto de la Ribera venía de perder un campeonato prácticamente ganado y los ánimos estaban por el piso. Mauricio Macri determina reforzar el equipo de Miguel Ángel Russo con Riquelme. Román volvía a su casa, a préstamo por cuatro meses.

Si bien el tiempo fue poco, pero muy intensos y lleno de alegría. ¿Por qué? Riquelme se puso, otra vez, al hombro a Boca Juniors y lo llevó a ganar su sexta Copa Libertadores.

DE VUELTA EN CASA

Boca arregla con Villarreal y repatria al 10, que lamentablemente no pudo estar habilitado para la final ante Milan por el Mundial de Clubes. En 2008, con Carlos Ischia como entrenador, logra el Apertura y la Recopa.

Luego empezaron las lesiones a jugarle una mala pasada. Román se perdía varios encuentros, intentaba volver pero se resentía. Necesitaba un parate. Para colmo, el equipo no respondía y deambulaban los entrenadores.

CUATRO AÑOS MÁS

Llegaba junio de 2010. Se le venció el contrato y varias idas y vueltas para renovarle. ¿El motivo? La duración. Riquelme exigia cuatro, mientras que una parte de la comisión directiva, liderados por el tesorero Daniel Angelici, querían dos. La gente ejercía presión con banderazos en el Obelisco. Paralelamente, Riquelme seguía recuperándose de una lesión.

Los días pasaban y hasta que llegó la firma. Ameal oficializaba que el enganche continuaría por cuatro años más y Angelici renunciaba solo a su cargo de Tesorero. Por lo cual utilizó este motivo para presentarse en las elecciones presidenciales de 2011.

IDAS Y VUELTAS CON FALCIONI

Boca era una lágrima. No encontraba el rumbo. Varios entrenadores pasaban y no podían aguantar la presión. Llegó Falcioni y la relación con el enganche fue mala. El entrenador quería un equipo 4-4-2, sin el 10. La gente se lo reprochó y tuvo que arreglárselas.

Llegó la pretemporada en Brasil y hubo una charla entre el entrenador y el ahora nuevo capitán. Fue fructífera. Acordaron tirar para adelante y los resultados estuvieron a la vista. Boca Juniors se consagró campeón invicto del Torneo Apertura 2011, con 12 puntos de diferencia sobre el segundo. Román, solo jugó la mitad de los partidos, nuevamente las lesiones lo marginaron, pero le fueron suficientes para marcar el rumbo del equipo.

Pero la alegría no durarían mucho tiempo. Algo se rompió en 2012, precisamente en Venezuela. Falcioni renunció luego del empate ante Zamora 0 a 0. La misma no fue aceptada por los dirigentes, quienes lograron que continúe. Lo cierto que Boca luchó por tres frentes hasta el final pero solo se llevó la Copa Argentina. Antes, perdió el campeonato ante Arsenal y la Libertadores en Brasil con Corinthians. Aquella noche, Riquelme anunciaba que se iba.

SUFRAMOS JUNTOS

El Xeneize continuó sin Román, y su rendimiento decayó. Falcioni no pudo encontrarle la vuelta al equipo. Pese a esto, los dirigentes tenían intenciones de renovarle, pero La Bombonera se hizo escuchar. Pidieron por Bianchi y por la vuelta de Riquelme, que se encontraba en su casa sin club alguno.

Angelici, acorralado por el pedido de la gente, repatrió al Virrey y la ilusión crecía. Pero no, Riquelme no se presentó a la pretemporada y parecía que Boca debía arreglárselas sin él. Lo cierto que luego del mal nivel del equipo en el verano, Román llamó al Virrey y le dijo: “Vuelvo y suframos juntos”.

El 2013 tuvo un arranque malo. Puesto 19 en el campeonato local y eliminado por penales en Cuartos de Final en la Libertadores. El segundo semestre mejoró un poco, aunque Boca nunca aprovechó las oportunidades de pelear el campeonato.

En el 2014 las cosas no cambiaron mucho. Una sola obligación, salir campeón. Lo cierto, que un campeonato muy parejo, Boca fue subcampeón, pero sin pelear por el título. Román en la cancha brilló, ejerciendo presión para obtener una renovación más.

¿ADIÓS O HASTA LUEGO?

Los días transcurrieron. Angelici puso muchas trabas al contrato de Román, mientras disfrutaba del Mundial en Brasil, las negociaciones no avanzaban. Pasó lo que muchos temían, Riquelme se cansó y arregló con otro club. Argentinos Juniors, que lo vio nacer, buscará volver a Primera con el 10 como líder del equipo. Por ahora firmó por 18 meses, el enganche avisó que piensa jugar hasta los 40. ¿Volverá?