Boca cayó ante Argentinos por 2-0, con dos goles en los últimos minutos de Gentiletti y Rius, tras fallas defensivas y flojas reacciones de Lucchetti. Riquelme tuvo un buen partido y completó los noventa minutos.

El primer tiempo fue aburrido, con pocas ocasiones. Muchas imprecisiones en el mediocampo dificultando la generación de juego y los porteros estuvieron bastante tranquilos.

Boca dependió de alguna pincelada de Juan Román Riquelme, quien el día de su regreso ya mostró sus pinceladas. De hecho, el enganche armó  dos de las tres ocasiones que tuvo el cuadro Xeneize durante la parte inicial. Es que fue él quien le metió un pase perfecto a Martín Palermo, quien entrando al área la tiró desviada, y también Román recibió de Matías Giménez, se metió en el área y la tiró hacia el medio en busca de Lucas Viatri, pero Nicolás Navarro, portero visitante, se quedó con el balón. Giménez también tiró un córner a la cabeza del Titán que Navarro logró desviar.

Boca empezó mejor el complemento, siempre con la participación clave de Riquelme para generar ocasiones (el diez casi mete un gol olímpico a los ocho minutos, pero el balón dio en el travesaño). Sin tener un gran rendimiento colectivo, el equipo de Claudio Borghi arrinconó a su rival contra Navarro. Román con un remate de media distancia y Giménez obligaron a lucirse al arquero visitante, mientras que Palermo intentó con la derecha pero no pudo darle buena dirección.

Clemente Rodríguez, proyectándose por la derecha, fue el mejor socio para que Riquelme pudiera descargar. De mitad de cancha hacia arriba fue de lo más destacado y se pareció por momentos a su etapa más recordada.

Argentinos fue mezquino y apostó únicamente a los contragolpes o alguna pelota detenida, donde a Boca le era complicado contrarrestarlo. Justamente de esa manera el Bicho, que había llegado menos pero había jugado igual de mal que Boca colectivamente, encontró la victoria cuando faltaba poco para el final. Córner al área, un rebote, Santiago Gentiletti con espacios y sin marca gira, le pega, Cristian Lucchetti ofrece poca resistencia y se le mete en el arco. Se jugaban 41. Dos más tarde, un contraataque de Argentinos, Andrés Romero disparó al cuerpo del guardameta boquense que dio un rebote innecesario y Ciro Rius liquidó el pleito.

Así sin brillo, con tristeza terminó el encuentro Boca. Derrotado una vez más a pesar del buen partido de Riquelme. Es que el Xeneize pagó caros los errores defensivos y, esta vez más que nunca, de su arquero. El martes 16 es el Superclásico, y ahí sí no queda otra alternativa que sumar de a tres.