El espectacular tatuaje de la Bombonera que se hizo Leandro Paredes en el pecho se viralizó por las redes sociales y volvió locos a los hinchas de Boca.
El futbolista de la Juventus decidió inmortalizar el estadio Alberto J. Armando en su piel y además le agregó una imagen suya, con la 5 en la espalda, jugando a la pelota. Sin dudas, una demostración más de amor hacia el club del cual es hincha y en el cual tiene decidido terminar su carrera profesional.
¿Qué otros futbolistas decidieron hacerse tattoos del Xeneize?
Marcos Rojo tiene en su pierna la imagen de Diego Armando Maradona fumando un habano, en el palco de la Bombonera. El defensor no le puso los colores de Boca, pero el retrato habla por sí sola.
Daniele De Rossi eligió escribirse la palabra “TANO” en el gemelo y la pintó de azul y amarillo. El italiano campeón del mundo en 2006 no solo cumplió el sueño de jugar en Boca, sino que se enamoró para siempre de esta gran pasión.
Antonio Barijho, multicampeón con el Xeneize, lleva en su brazo la Copa Libertadores y la Copa Intercontinental más la palabra “Leyendas”. El tatuaje del Chipi, que también tiene el escudo en la pierna, hace referencia al año 2000, uno de los más glorioso en la vida del CABJ.
Yamila Rodríguez se hizo una foto suya con la camiseta de Boca y la entrada principal a la Bombonera de fondo. La figura del equipo femenino cumplió su sueño de jugar en Brandsen al 805 y decidió llevarlo en la zona de la tibia. También tiene a Maradona.
Darío Benedetto tiene el escudo en la zona de las costillas junto a la popular frase “Esto es Boca”. Pipa se lo hizo antes de arribar al club en 2016, mientras jugaba en el América de México. Bostero de ley.
Por su parte, Clemente Rodríguez tiene la Copa Libertadores junto a tres estrellas que hacen referencia a las que ganó mientras defendió la camiseta boquenses. El exlateral alcanzó la Gloria Eterna en 2001, 2003 y 2007.
Hay más: Agustín Sandez también tiene a Maradona con la camiseta de Boca; Marco Matterazzi, otro que integró el plantel de Italia campeón del mundo en 2006, lleva el escudo en su muslo; y Fabio Pisacane, otro jugador tano, lo tiene en el brazo.