El defensor admitió que ante Barcelona, el equipo bajó su rendimiento. “Dimos un paso atrás y nos hizo terminar sufriendo”, recalcó.

Matías Caruzzo fue entrevistado por Rock and Closs y dio su punto de vista sobre el triunfo de anoche contra Barcelona de Ecuador y fue autocrítico con el segundo tiempo que jugó Boca:

“En el segundo tiempo no jugamos como debíamos jugar.Dimos un paso atrás y nos hizo terminar sufriendo”.

Sostuvo que los partidos se ven distintos adentro de la cancha y afuera. Además, diferenció algunas críticas:

“A la hora de analizar el juego nosotros dentro de la cancha tenemos una visión del juego y de afuera se ve otra cosa. Incluso me pasa a mí ver por la tele a Boca y que se nota otra cosa que adentro de la cancha, por la vorágine a la que te lleva el juego”.

“Uno está al tanto de las críticas y las toma como de quien viene. Se toma la crítica constructiva, cuando se falta el respeto no. Cuando se pone en tela de juicio si hay jugadores que tienen o no jerarquía para jugar en Boca, o si se cumplió o no un ciclo, tratamos de no meternos”.

“Yo no soy de ponerme a escuchar conferencias de prensa, me he aislado bastante desde que llegué a Boca de escuchar comentarios y a uno le hace mejor, cuando le va bien y cuando le va mal. Si no lamentablemente ante las críticas y los elogios te terminas mareando”.

Sobre las declaraciones de Carlos Bianchi, quien señaló que no todos podían jugar en Boca, consideró:

“A lo que hacía mención Carlos era a lo táctico. Él tiene una idea de pararnos treinta metros más adelante y lleva un tiempo de adaptación. A veces uno al margen de que se cometen errores, sucede que no tuvimos un buen arranque, tuvimos malos resultados. Nos convirtieron demasiados goles en los principios de los partidos y nos preocupaba”.

Se explayó sobre el “Virrey”:

“Carlos marcó siempre cosas muy simples. Él mismo dijo que había que cambiar el chip. Cada técnico tiene su manera de juego, de parar el equipo en cancha. Nosotros veníamos de jugar con Julio (Falcioni) con un 4-4-2, juntando líneas siempre hacia nuestro arco. Y hoy tratamos de pararnos 30 metros más adelante. Son diferentes formas de ver el juego”.

En cuanto a la polémica jugada en que derribó a Damián Díaz dentro del área, Caruzzo bromeó:

“Está entre los tres penales más grandes que hice”.

“Vi que Agustín (Orion) no tuvo reacción en ese momento y no tenía otra alternativa. No lo cobra porque me parece que ve que me quedo con la pelota y eso lo  hace creer que no es penal”.