Aprovechando el parate por la fecha FIFA, Villarreal celebró su centenario de vida y organizó el Partido de las Leyendas en el Estadio de la Cerámica. En este amistoso se enfrentaron los ídolos históricos del Submarino Amarillo y las glorias del seleccionado español, con múltiple presencia de argentinos.
Allí, Boca dijo presente debido a que Juan Román Riquelme y Martín Palermo fueron dos de los invitados de lujo. En la previa al encuentro, ambos fueron recibidos con una emotiva ovación y luego desplegaron su magia en el campo de juego, como lo hicieron hace unos años con la camiseta azul y oro.
El vicepresidente del Xeneize demostró su vigencia y en sus casi 65 minutos en cancha, dio unas cuantas pinceladas que deleitó a todos los fanáticos. La jugada que generó muchísimos aplausos fue al minuto 25, en la cual JRR metió un pase entre líneas para Javi Venta, quien no pudo asistir a Palermo.
En el arranque del partido, el viejo Madrigal fue testigo de la conexión sudamericana. Todo comenzó con un pase del DT de Platense y con un toque sutil Riquelme intentó dejar mano a mano a Diego Forlán, otro de los más aplaudidos en esta jornada.
Y en los últimos minutos en cancha, el enganche se destacó a puro amague y pisadas, con un remate que se fue a pocos metros del arco. Por el lado del máximo artillero azul y oro, en el arranque del amistoso probó con un remate desde el círculo central, intentando emular el gol a Independiente en Avellaneda, aunque a este le faltó algo de potencia.
El Titán interceptó pelotas, se conectó en tres cuartos de cancha principalmente con Román en reiteradas oportunidades. Pero las situaciones de gol fueron pocas para el 9, que se fue ovacionado en una jornada más que histórica.