11 de mayo de 2014. Decimoctava fecha del Torneo Final y Boca disputaba su último partido como local ante Lanús. Pero no era un partido más y mucho menos para Juan Román Riquelme. El ídolo del cuadro de la Ribera estaba a punto de finalizar su contrato y se encontraba en conflicto con la dirigencia encabezada por Daniel Angelici. Sin un acuerdo en el corto plazo, el volante disputaría su último partido con la azul y oro.
En cada una de las tribunas, se sentía en el ambiente, una última función en el patio de su casa, como lo denominó el ahora presidente del Único Grande. Y más allá de haber cerrado una etapa con un buen triunfo ante el Granate, el “10” se lució como en cada una de sus apariciones, con dos perlitas en el campo de juego. La más recordada por todas, fue su caño sin tocar la pelota, una jugada que sigue en la memoria de todos a 10 años de aquel hecho.
Promediaban los 20 minutos del segundo tiempo, Boca triunfaba por 2-1 y tras una jugada que inició por la banda izquierda, JRR hizo un caño y su víctima fue Carlos Izquierdoz, defensor que años más tarde jugaría en el Xeneize y que coincidiría con la etapa del habilidoso mediocampista en su rol como dirigente. Tan solo bastaron unas milésimas de segundos para que los hinchas ovacionaran y se volvieran locos por el último de tantos lujos en la carrera de Riquelme.
¿Qué había dicho Izquierdoz sobre el recordado caño de Riquelme?
Tras una actuación, en la que se había lucido con varias jugadas, Román coronó lo que sería su despedida con un fantástico caño. JRR iba a recibir un pase e Izquierdoz se acercaba al volante para marcarlo. Sin embargo, el 10 dejó pasar la pelota por debajo de la suela y el “Cali” no llegó a cerrar las piernas a tiempo. Acto seguido, todos los espectadores celebraron eufóricos una de las últimas pinceladas del ídolo Xeneize.
Tiempo después, el futbolista con pasado en el Granate recordó todo lo sucedido y mencionó una posible broma por parte del actual presidente. “El caño que me hizo Riquelme lo recuerdo bien, fue una situación especial ese día. Capaz que él me dice algo y espero que sea gracioso”, declaraba el excapitán del cuadro de la Ribera.
La otra jugada de Riquelme que despertó la ovación de los Xeneizes
Muchos se acordarán de aquel caño a Izquierdoz. Pero no fue el único lujo en aquel domingo donde la lluvia también fue protagonista. A los pocos minutos de haber iniciado el partido, Román comenzó a lucirse con una jugada ante Jorge Ortíz. Con sus botines negros, marca registrada en él, aguantó la pelota y la cubrió como solo él podía hacerlo, algo que despertó el enojo del mediocampista rival.
Bastaron tan solo unos segundos y al no poder quitarle el balón, el “Marciano” le cometió una infracción, jugada que derivó en otro recordado gesto del oriundo de Don Torcuato. Una vez sancionada esta falta por parte de Andrés Merlos, Riquelme se dio vuelta, tomó la pelota con la mano y se la mostró al jugador del Granate con un gesto desafiante. Los hinchas se hicieron notar y una vez más bajó de las tribunas el famoso “Riquelmeee, Riquelmeeee…“