En una nueva noche de Copa Libertadores, Boca sufrió su primera derrota en la fase de grupos. Por el partido correspondiente a la cuarta fecha, cayó por 1-0 frente a Deportivo Pereira en Colombia y su clasificación a la próxima instancia deberá aguardar unas semanas más.
La paridad entre Colo Colo y Monagas abría una puerta para que el Xeneize obtuviera el pasaje a la fase eliminatoria en suelo cafetero. Sin embargo, el gol de Arley Rodríguez cambió las cosas y el Grupo F está al rojo vivo, en el cual los cuatro equipos tienen chances de sacar el boleto a los octavos de final.
¿Cómo quedaron las cosas? A pesar de la derrota, el resultado influye en el liderazgo. Tanto el cuadro de la Ribera como el Matecaña cosecharon siete puntos, pero los dirigidos por Jorge Almirón se ubican en lo más alto gracias a la diferencia de gol.
Lo positivo para el conjunto azul y oro es que depende de sí mismo, y para colmo, afrontará los dos encuentros restantes en La Bombonera. Restan seis puntos en juego y el próximo cotejo será clave frente al Cacique. Si suma de a tres, se colocará entre los mejores 16 de la Copa.
Un empate pone en suspenso la definición del grupo y necesitaría de otros resultados para seguir en lo más alto. Por supuesto, que una derrota opacaría la situación, quedaría relegado en cuanto a las posiciones y debería salir a matar o morir ante Monagas en la última jornada. Las ilusiones siguen vivas. Boca depende de Boca.
