Agustín Rossi será jugador del Flamengo de Brasil a partir del 30 de junio. El arquero no renovó su vínculo contractual con Boca, se fue a préstamo al Al Nassr de Arabia Saudita y, tras cumplir con el periodo de la cesión, se sumará al equipo de Río de Janeiro.
El arquero no tiene redes sociales y se le conoce poco la voz en los medios de comunicación. No habló del tema durante las negociaciones ni tras emigrar a tierras árabes: meses después de irse del Xeneize, Rossi habló con ESPN F10 y dio detalles de la negociación fallida con el club.
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En primer lugar, aclaró: “Yo siempre le dije a mi repre que me quería quedar, pero no se llegó a buen puerto en las negociaciones“. Y explicó que tras no llevar a buen puerto “en la última reunión le aclaramos a Boca que queríamos dejarle algo al club en caso de no arreglar por el hecho de la oportunidad que le dio Boca. Ese buzo es el más grande del fútbol argentino”.
Agustín explicó su postura a la hora de la firma contractual. Y reveló que el motivo, en primer lugar, no pasaba por el factor económico: “Mi idea era quedarme pero no por 4 años. Por eso quería bajar la cláusula o firmar por menos. Lo empezamos conversando después del quilombo con Mineiro, pero la primera charla después de eso se dio al año”.
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“Nosotros salimos a Emiratos Árabes para la final contra Racing. Llega el día del partido, Ibarra da el equipo y yo quedé afuera del banco. Lo miré desde el palco“, empezó el arquero sobre la situación. “Después del partido, Ibarra dice que no contaba con jugadores que no están comprometidos. Lo respeto, pero fue raro, porque desde agosto que se venía hablando esto y siempre atajé“, agregó.
Rossi nunca volvió a Boca tras viajar con la delegación. Llegó la propuesta del Al Nassr y la operación se cerró en cuestión de horas. “Lo llamé a Román y le conté que estaba esta opción, en esas horas se definió todo. En la escala de Madrid, me quedé ahí porque llegaron los papeles y se hizo el pase. Tuve que comprarme dos valijas de ropa porque estaba solo con la del club”.
