Matías Galarza es uno de los jugadores que despertó el real interés de Boca en este mercado de pases. Se sabe que hace algún tiempo el xeneize le hizo una oferta formal al Genk, pero que el club belga rechazó. Hace pocas horas, en varios medios se conoció la noticia de que el jugador viajó a Argentina a “forzar su salida para firmar con Boca”. ¿Realmente es tan así?

Más allá de que para el jugador la camiseta de Boca es prioridad, y sigue en permanente comunicación con el entorno xeneize, la realidad es que el jugador tomó la decisión de regresar al país porque se volvió muy tensa la relación con el club dueño de su pase. Tanto que se le imposibilitaba entrenarse día a día en las mejores condiciones.

Matías Galarza quiere definir su futuro: ¿será en Boca?

Lejos de su familia y con poco apoyo desde el Genk, Galarza decidió de manera unilateral regresar a la Argentina para entrenarse en otras condiciones y estar con sus seres queridos.

Galarza está a la espera de que se active la negociación. Hace varias semanas que Boca no volvió a hablar con el Genk. El jugador, mientras tanto, se entrena y también maneja la posibilidad de jugar en otros clubes, incluso de Argentina.

El mercado está cerca de su fin y si bien su esperanza máxima está en vestir la azul y oro, su entorno evaluará otras ofertas. Pero con la que parece ser una certeza: su relación con el Genk está quebrada y será muy difícil recomponerla.