Boca logró un triunfo importantísimo frente a Gimnasia por la Liga Profesional en La Bombonera. Milton Giménez convirtió a los 15 minutos de comenzado el partido y el equipo se acercó un poco más al objetivo de la Copa Libertadores. Hubo visitas muy especiales en el estadio que se hicieron virales en las redes.

Una de ellas fue la de Luciano Acosta, jugador surgido en el Xeneize y actualmente en el Cincinnati de la MLS. Fue nominado como uno de los mejores mediocampistas del mundo par alos premios The Best.

El futbolista se había postulado para volver a Boca en las últimas semanas. “Siempre es un sueño jugar en Boca. Me fui de muy chico, es una espina que tengo clavada y ojalá algún día pueda pasar. Sino, seguirá alentando como un fanático más“, comentó Acosta en diálogo con ESPN F3.

¿Por qué la vuelta de Luciano Acosta a Boca es muy complicada?

La calidad de Luciano Acosta es algo que se veía desde sus inicios como futbolista. Supo hacerse un nombre en la MLS y convertirse en uno de los mejores jugadores de la liga. Si bien no tuvo lugar en Boca, está claro que su incorporación potenciaría el mediocampo.

Sin embargo, hay un detalle que hace casi imposible su vuelta al club. Actualmente tiene contrato con el Cincinnati y según la página especializada Transfermarkt el valor de su ficha rondaría los 8 millones de dólares.

Al mismo tiempo, cobra un contrato muy elevado en el equipo estadounidense. Entonces, no sólo Boca debería poner varios millones para traerlo sino que también el ofrecimiento salarial debería ser acorde. Claro está que si tuviera que ver con un deseo del jugador, seguramente resignaría dinero para llegar.

“No está en el radar, es un jugador que gusta. Recordemos que tiene contrato hasta 2026, pero Cincinnati lo considera prescindible en este mercado“, reveló Diego Monroig hace un tiempo sobre el volante.

Los números de Luciano Acosta en Boca

Luciano Acosta debutó en 2014 con la camiseta de Boca. Carlos Bianchi lo llevó a la pretemporada y lo puso de titular en algunos partidos de verano, donde logró una buena actuación. En todo ese año jugó 28 partidos y convirtió 2 goles. Al no tener tanto rodaje, fue cedido a Estudiantes de La Plata y ya no volvió a ponerse la camiseta del Xeneize.