No es novedad que Pol Fernández está muy lejos de su mejor versión. El capitán de Boca ante la ausencia de Marcos Rojo supo ser clave durante el 2022 y en este último tiempo fue, quizás, uno de los puntos “blandos” del equipo. Pero el cuerpo técnico confía en que puede recuperar al “mejor Pol”.

La idea de Hugo Ibarra es clara. Y ya se vio en el partido ante Platense: el DT incluyó a Ezequiel Fernández en el once inicial para que oficie de doble pivote con Alan Varela. Cuando le taparon la salida al volante central, el que bajó a buscar fue Equi y no Pol. La intención del cuerpo técnico fue desligar al capitán de las tareas de creación para que pueda explotar otro de sus puntos fuertes.

En el calendario pasado una de las mayores virtudes de Fernández fue la llegada al vacío. Convirtió varios goles picando al espacio y apareciendo por sorpresa en al área rival. Más allá de que no tuvo precisión, contra Platense volvió a hacerlo después de mucho tiempo. Y tiene que ver con cómo estuvo armado el mediocampo.

Con Óscar de enganche y lanzador; sumado al doble cinco en la creación, el DT le da libertad a Pol para que explote su juego sin pelota y asuma el rol de llegador. Ahora, en el entrenamiento matutino, Ibarra sacó a Varela y puso a Martín Payero (creador de juego) como otra muestra de lo que quiere del capitán en este Boca.