En el último encuentro del domingo, Platense visitó a River en el Monumental y dejó una correcta imagen más allá de la derrota por 2 a 1.
El conjunto de Saavedra se mostró siempre en partido, le compitió al Millonario e hizo que Martín Palermo, entrenador del Calamar, se fuera conforme pese a no haber sumado ningún punto.
Antes del inicio del partido, justo cuando la voz del estadio nombró las formaciones, el Titán fue silbado por los hinchas que se hicieron presentes en Núñez. Sin embargo, en la conferencia de prensa posterior, él respondió con cierta ironía al respecto.
“Cuando me nombraron no escuché, estaba en el vestuario y después fue normal. Creo que pasé desapercibido”, declaró el hombre que supo convertirle una enrome cantidad de goles a River, transformándose en uno de sus mayores verdugos.