Juan Román Riquelme es sinónimo de Boca. Su carrera como jugador y su influencia en el fútbol argentino como el último enganche lo han colocado entre los mejores de la historia del club.
Nacido en Don Torcuato un 24 de junio de 1978, el ídolo Xeneize se crió como el mayor de 11 hermanos. Desde los seis años, cuando jugaba en el barrio, ya demostraba un talento natural que llamaba la atención de compañeros y rivales.
Pasó por distintos clubes de baby fútbol desplegando su magia hasta que en 1991 estuvo a prueba en Argentinos Juniors y terminó formando parte de las divisiones inferiores. A los 18 años, de la mano de Carlos Bilardo en 1996, fue transferido a Boca junto con cuatro de sus compañeros.
El 10 de noviembre de ese año se produjo su debut ante Unión en La Bombonera, por el Torneo Apertura. Fue triunfo 2 a 0 y el joven Román le dio una asistencia a Fernando Cáceres. Al término del encuentro, respondió ante las cámaras mientras recibía su primera ovación: “Esto es impresionante, no se puede creer, la verdad que es un sueño“.
Mientras se forjaba el nuevo 10, Diego Maradona estaba en el mismo plantel y empezaba a despedirse del fútbol. Tal es así, que el 25 de octubre de 1997 en el Superclásico ante River, Riquelme lo reemplazó en el entretiempo en la que sería su última presentación como jugador profesional.
Casi un año después, llegó Carlos Bianchi al banco de suplentes y el 10 se convirtió en una pieza fundamental. Sería el inicio de una década dorada para la historia de la institución con él como protagonista. Primero, con el bicampeonato de los torneos Apertura 1998 y Clausura 1999.
Después vino la competencia que empezó con el mito: la Copa Libertadores. En el 2000, Boca volvió a la competencia después de estar seis años ausente. El Torero aportó tres goles en once partidos, dos de ellos frente a River en cuartos de final. Además, convirtió su penal en la final ante Palmeiras en el Morumbí, donde el Xeneize se consagró campeón.
En la Intercontinental de ese año, brilló ante el Real Madrid y fue campeón del mundo llevando el trofeo a Brandsen 805 después de 23 años. En 2001, siempre con Bianchi al mando, jugó una Libertadores superlativa y fue la figura indiscutida a lo largo de todo el torneo.
La vuelta ante Palmeiras en las semifinales fue el momento para desplegar todo su potrero y jerarquía con solo 22 años. El equipo pasó por penales (él convirtió el suyo) y ante Cruz Azul se consiguió el bicampeonato de América, también desde los doce pasos.
Mientras tanto, el Barcelona posó sus ojos en él y Boca pretendía venderlo por varios millones de dólares. Enterado de esta situación y con un enfrentamiento entre plantel y dirigentes, Román le hizo el “Topo Gigio” a Mauricio Macri dejando una postal eterna para el fútbol argentino.
Al año siguiente fue comprado por el Barcelona en 13 millones de dólares. No era querido por Louis Van Gaal y solo un año después terminó yéndose al Villarreal. En el Submarino Amarillo llegó a la idolatría y ganó un título a lo largo de cuatro temporadas.
En 2007, volvió a Boca por solo cinco meses en busca de ganar la Copa Libertadores. Ese poco tiempo le bastó para firmar una de las actuaciones individuales más destacadas de la historia del torneo con ocho goles en 11 partidos y convirtiendo en todas las series de eliminación directa.
Un año más tarde, volvió al club definitivamente y cosechó cuatro títulos más (Recopa Sudamericana 2008, Apertura 2008, Apertura 2011 y Copa Argentina 2012). Disputó la final de la Copa Libertadores 2012, donde el equipo cayó ante Corinthians 2 a 0 en el Pacaembú y decidió no jugar más.
Sin embargo, volvió de la mano de Carlos Bianchi en enero de 2013 y fue clave para llegar a los cuartos de final de la Copa Libertadores de ese año. La caída por penales ante Newell’s significó su último partido internacional con la camiseta de Boca. Un año después, enfrentado con los dirigentes, terminó yéndose a Argentinos Juniors a disputar la B Nacional y posteriormente retirarse como profesional.
En total, jugó 388 partidos y metió 92 goles a lo largo de sus tres etapas como jugador de Boca (1996-2002/2007/2008-2014). Ganó 11 títulos, entre ellos tres Copas Libertadores y una Intercontinental.
En 2019, cinco años y medio después de haberse ido, regresó como Vicepresidente 2°. Se sumó a la lista de Jorge Amor Ameal que resultó electo con el 52.48% de los votos.
Qué títulos ganó Juan Román Riquelme como jugador de Boca
- Apertura 1998
- Clausura 1999
- Copa Libertadores 2000
- Apertura 2000
- Intercontinental 2000
- Libertadores 2001
- Copa Libertadores 2007
- Recopa Sudamericana 2008
- Apertura 2008
- Apertura 2011
- Copa Argentina 2012
El mejor ante Real Madrid en Japón, con Figo del otro lado
Si hay que recordar un partido consagratorio, el del 28 de noviembre del 2000 ante el Real Madrid es el más importante. La primera Copa Intercontinental que disputaba Boca en Japón ante el mejor equipo del mundo que contaba con el Balón de Oro (Luis Figo) en su plantel.
Si bien ya llamaba la atención en Europa su forma de jugar, lo cierto es que este encuentro lo terminó de confirmar. Enloqueció a Claude Makélélé con sus gambetas y se encargó de asistir a Martín Palermo para el segundo gol de la noche.
Más allá de que el Titán fue elegido como la figura por convertir los dos goles, la actuación de Riquelme resultó inolvidable para los hinchas de Boca, y ni hablar para los jugadores del Real Madrid.
¿Cómo fue la historia del Topo Gigio?
Boca enfrentó a River en el Clausura 2001 en medio de un clima tenso entre jugadores y dirigentes. Deudas de premios y una supuesta venta de Juan Román Riquelme al Barcelona cerrada en 26 millones de dólares dejaron el ambiente muy complicado de cara al Superclásico.
El Xeneize triunfó 3 a 0 con goles de Hugo Ibarra, Riquelme y Guillermo Barros Schelotto. Pero en la segunda conquista, en la cabeza del 10, estuvo un momento histórico e inolvidable para los hinchas de Boca y para todo el fútbol argentino.
Con seriedad en su rostro y sus manos delante de las orejas, Román fue hacia el palco de Mauricio Macri e inmortalizó un festejo para toda la eternidad. Consultadopor lo hecho al final del partido respondió: “Por nada en especial, solamente que a mi hija le gusta el Topo Gigio y nada más“.
La primera vuelta para ganar la Copa Libertadores 2007
A dos meses de perder el tricampeonato frente a Estudiantes, Boca necesitaba más que nunca una alegría. Por eso, Juan Román Riquelme volvió en 2007 a préstamo del Villarreal por el primer semestre.
El enganche fue fundamental para ganar la sexta Copa Libertadores ese año convirtiendo ocho goles en 11 partidos. La gran mayoría los hizo en fase de eliminación directa, marcando en cada una de las cuatro series. En la final ante Gremio, metió un gol de tiro libre en la ida y un doblete en la vuelta.
Es su paso más recordado en el club debido a la alta importancia que tuvo en el poco tiempo que duró su vínculo.
Los últimos títulos de Riquelme en Boca
En 2011, con Julio César Falcioni como entrenador, Román ganó el Torneo Apertura de manera invicta. Sin el protagonismo que acostumbraba por distintas lesiones, el diez jugó 11 partidos y convirtió solamente un gol.
Al año siguiente participó de la Copa Argentina hasta semifinales. La definición se jugó luego de que decidiera alejarse del club, pero el título que obtuvo el Xeneize ante Racing se le computa como su última consagración en la institución.
El primer alejamiento después de la final de Libertadores 2012
Al año siguiente, Boca llegó a la décima final de Copa Libertadores de su historia frente al Corinthians. Un empate 1 a 1 en la ida y la derrota 2 a 0 en la vuelta significaron la primera consagración para los brasileños. Pero una declaración del capitán tras el partido llenó de dudas a los hinchas de Boca.
“Me siento vacío y no tengo nada más para dar“, señaló Riquelme poco después de perder la final. El semestre siguiente no formó parte del plantel y regresó en enero de 2013, junto con Carlos Bianchi que reemplazaba a Falcioni en el banco de suplentes.
En 2013 volvió a ser fundamental para llevar a Boca a los cuartos de final de la Copa Libertadores. Pero se despidió ante Newell’s por penales y ya no volvió a disputar el torneo como jugador.
Su etapa como Vicepresidente de Boca
Juan Román Riquelme anunció su retiro del fútbol profesional en enero de 2015, días después de haber ascendido a primera división con Argentinos Juniors. Desde ese momento, su enfrentamiento con la dirigencia encabezada por Daniel Angelici fue el motivo de no regresar al club de ninguna forma.
Sin embargo, en 2019 se sumó como Vicepresidente 2° a la lista de Jorge Amor Ameal, resultando electo con el 52.84% de los votos. En una de las primeras medidas, decidió conformar el Consejo de Fútbol con glorias del club y al mismo tiempo colocar a otras como entrenadores de inferiores.
Durante su gestión, el Xeneize ganó siete títulos locales: Superliga 2019/20, Copa Maradona 2020, Copa Argentina 2021, Copa de la Liga Profesional 2022, Liga Profesional 2022, Supercopa Argentina 2022.
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