A lo largo de los últimos años, varios jugadores llegaron a Boca con el sueño de ser importantes para el club. Algunos lograron mantenerse en el plantel, pero otros debieron buscar otros destinos. Ese es el caso de Nazareno Solís.
El delantero llegó al conjunto de la Ribera después de haberse destacado en Talleres de Córdoba. Sin embargo, su estancia en el Xeneize no fue como esperaba. Con poco protagonismo, fue cedido a varios equipos para que sume rodaje. Incluso al día de hoy, se encuentra a préstamo, pero su presente es inmejorable.
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El gran presente de Nazareno Solís en Deportivo Madryn
Solís regresó al Xeneize a finales del 2024. Pero fue uno de los varios jugadores que no iban a ser tenidos en cuenta por Fernando Gago. De esta manera, nuevamente debió buscar un club para jugar. Es así que llegó la propuesta de Deportivo Madryn, equipo dirigido por Leandro Gracian, que venía de ser ayudante de Hugo Ibarra en Boca.
A partir de entonces, Nazareno atraviesa un muy buen presente con el elenco “Aurinegro” en la Primera Nacional. Llegó a comienzos de año y es una pieza clave en el plantel habiendo jugado casi todos los partidos. A su vez, en los últimos 4 partidos, marcó 3 goles. El último tanto lo marcó el pasado domingo cuando Deportivo Madryn venció 3-1 a Güemes de Santiago del Estero. Lleva 5 gritos en lo que va del torneo.
Nazareno Solís es figura en Deportivo Madryn. (Deportivo Madryn Oficial)
Sin dudas, el futbolista que hoy pertenece a Boca, vive un grandísimo momento en su carrera en lo que es su octavo préstamo consecutivo. Cabe destacar que el ex Villa Dálmine deberá regresar a Brandsen 805 en diciembre de 2026 que es cuando finaliza su préstamo.
Los números de Nazareno Solís en Boca
Nazareno Solís llegó a Boca en 2016, luego de un muy buen paso por Talleres. Su rendimiento en el elenco cordobés lo posicionaba como una de las grandes promesas del fútbol argentino, así como una de las figuras del momento.
Sin embargo, sus oportunidades fueron pocas. No tuvo muchos minutos con la camiseta Xeneize y cuando tuvo chances de jugar, tampoco rindió lo esperado. Quedó relegado por cada entrenador que llegó al club desde entonces. En su etapa como jugador del Único Grande, Solís disputó apenas 9 partidos sin goles convertidos. Un dato curioso: no perdió ningún partido en los encuentros que jugó. La Superliga 2016/2017 es su único título con la camiseta azul y oro.
