Diego Martínez quedó preocupado por la derrota de Boca ante Platense. El director técnico puso lo mejor que tenía a disposición para el encuentro en Vicente López: de hecho, solo Edinson Cavani quedó afuera y evitó que se use al equipo ideal. Pero, aun así, el Xeneize mostró una floja versión ante el “Calamar” y parece haber dado un paso atrás en cuanto al funcionamiento.
Si bien existieron ciertos contratiempos, con la dolencia de Equi Fernández, el director técnico no está conforme con la versión que mostró el equipo este domingo. Y por eso tomó una serie de decisiones para aprovechar bien estos días sin partidos: el próximo compromiso será el viernes 14 de junio ante Vélez, en La Bombonera.
Diego Martínez medita armar un amistoso en Boca Predio esta semana
La primera medida que tomó Diego Martínez fue bajar la cantidad de días de descanso que tenía estipulada antes del partido. Boca iba a tener tres días libres por la fecha FIFA, pero finalmente serán dos: el plantel regresará a los entrenamientos este martes, cuando todo indicaba que iba a ser el miércoles o jueves.
Pero eso no es todo, porque el periodista Augusto César reveló en ESPN F12 que es posible que haya una actividad que nadie tenía planeada para estos días. “El técnico quedó tan preocupado por lo del domingo en Platense que no descarta un amistoso este fin de semana en Ezeiza, a puertas cerradas“, sostuvo el cronista.
El plan de Diego Martínez para el arranque del segundo semestre
La idea del director técnico es poder contar con los jugadores citados por Javier Mascherano para los Juegos Olímpicos en el partido de ida de los 16avos de la Copa Sudamericana 2024. Si eso no sucede, de todas formas Boca intentará traer dos refuerzos que puedan llegar para ese momento.
El partido de ida del repechaje se jugará el 14 de julio y Boca será visitante. La vuelta será una semana después en La Bombonera. Este sábado 8 de junio se cerrará la fase de grupos de la Copa Libertadores y se sabrá el rival del Xeneize en 16avos de la Sudamericana.