Un primero de enero Diego Martínez regresó a trabajar a Boca Juniors. Aquella foto donde se conocieron los nueve integrantes del cuerpo técnico ya quedó como un recuerdo. Ese día feriado en nuestro país, se empezó a ver el sello de un grupo muy trabajador que terminó sus tareas a las 2 de la madrugada del otro día y pocas horas más tarde, 6:45 para ser exactos, eludiendo a la prensa que los esperaba a partir de las 7am, llegaron al predio para recibir a sus futuros dirigidos.

De la charla de bienvenida los jugadores sacaron dos conclusiones sobre ese grupo de trabajo. La primera, que es un grupo que marca muy poca distancia con el plantel; y la segunda, que tiene muy claro lo que quiere dentro de un campo del juego. “Me gusta que mi equipo tenga la pelota y ser protagonista del partido, les dijo el flamante DT en la primera charla, que hace mucho el plantel Xeneize quería escuchar y espera que se refleje a partir del primer partido por los puntos frente a Platense el 28 de enero.

Diego Martínez en la práctica de Boca. (Boca Oficial)

Diego Martínez en la práctica de Boca. (Boca Oficial)

La cercanía del nuevo cuerpo técnico de Boca con el plantel

En cuanto a la cercanía del jugador, la mayoría lo notaron desde el primer día de trabajo. Diego Martinez y Cristian Bardaro son los que están más cerca de los deportistas en cada entrenamiento. Los alienta permanentemente jugada tras jugada llamándolos por el nombre, diminutivo o apodo. Edi”, “Chiqui” fueron algunos de los jugadores más mencionados en la práctica abierta, demostrando su cercanía en el trato también con los más experimentados.

“Esta semana sentimos una cercanía y predisposición muy grande de los futbolistas (…)Somos un grupo de laburo de perfil bajo, de convencer a los jugadores”.

Esta frase mencionada en la conferencia de prensa de presentación a sólo 3 días de conocer a los jugadores fue resaltada por todos los periodistas presentes. La cercanía es tal que, al igual que en los otros equipos que dirigieron, suelen participar de los picados informales en la semana. En las últimas horas se dio la ocasión bajo una intensa lluvia en Ezeiza. Martínez de un lado, Bardaro del otro fueron algunos de los integrantes de este CT que participaron del partido que tuvo como condimento ver a Blondel, nuevamente como en Tigre derrotando al DT en un duelo futbolístico, y Langoni de arqueros. Al ex Vélez le fue mucho mejor que al “Gigoló”, ya que convirtió dos goles y formó parte del equipo ganador junto a Anselmino, Weigandt, Figal, Rojo, Fabra, Valdez, Romero, García y Campuzano entre otros.

Diego Martínez, en todos los detalles del Boca Predio

Al margen de lo futbolístico, los empleados también se sienten muy reconocidos por este grupo de trabajo, preocupándose por conocer cada nombre, consultándoles a la hora de abordar las situaciones desde distintas áreas y destacando como algo positivo las cosas que ya estaban implementadas en el predio de Ezeiza. No hubo ningún pedido especial en cuanto a infraestructura o equipamiento, se amoldó muy bien y se sorprendió por todas las cosas que ya el predio poseía afirman los presentes en el día a día de Boca predio.

En estos 10 días, el balance es más que positivo. A los jugadores les gustó mucho la diferente metodología de trabajo haciendo especialmente foco en la parte humana, pero el flamante cuerpo técnico sabe que en Boca lo que manda son los resultados. El “Boca es deportivo ganar siempre”, que utilizó Basile resuena más que nunca en los pasillos de La Bombonera al tener que disputar la Copa Sudamericana como objetivo máximo y todo lo trabajado en estas pocas horas deberá a empezar a dar sus frutos a partir del 28 de enero, cuando el equipo enfrente a Platense en condición de visitante.  

“Somos un cuerpo técnico de perfil bajo, que trabaja mucho en la parte humana, que es muy importante, más allá de lo futbolístico”.