Tarde o temprano, Ezequiel Fernández iba a regresar a Boca. En el 2021, el volante fue una de las figuras de la Reserva y a comienzos de este año fue cedido a préstamo a Tigre, donde demostró su calidad en una gran temporada para el “Matador”, llegando a la final de la Copa de la Liga y culminando en el lote de arriba de la Tabla Anual.
A lo largo de los 42 partidos, fue titular en gran parte de ellos mostrando un nivel superlativo, y aunque no pudo anotar goles, si repartió una asistencia y vio la tarjeta roja en dos ocasiones. Finalmente, el Consejo de Fútbol determinó su vuelta para el comienzo de la temporada en diciembre y peleará por un lugar junto a Alan Varela y Esteban Rolón en la mitad de la cancha.
Su nivel y características lo pueden acercar a la titularidad y en ese caso, ¿qué posición ocuparía? Claro está que “Equi” se destaca por ser un jugador de buen toque, visión de juego y quite, por lo que no sería descabellado una dupla junto a Varela. Allí, aparece la opción de ver esta sociedad en un 4-2-3-1, acompañado de algunos volantes por afuera o delanteros retrasándose unos metros como Sebastián Villa o Luca Langoni.
También existe la posibilidad de su presencia como “único 5”, y esta función le generaría más libertad a “Pol” Fernández, ubicado unos metros más adelante y con más llegada al área rival. Además del incremento en el peso ofensivo junto a otros volantes de este perfil en el que aparecen Juan Ramírez, Óscar Romero o Martín Payero, formando el 4-3-3 habitual, transformado en ocasiones al 4-3-1-2.
Son muchas las variantes que Fernández puede ofrecerle al “Xeneize” y que tendrá continuidad al regresar en un 2023 repleto de competiciones. La pretemporada será fundamental para el futbolista, y el cuerpo técnico que podrá probarlo en algunos amistosos que seguramente se darán en la previa al arranque de la temporada oficial.