Luego del empate ante Temperley, el plantel se entrenó en Casa Amarilla de cara al duelo del miércoles. Osvaldo hizo trabajos aparte y junto al plantel.
Boca no se tomó descanso. El empate ante Temperley dejó muchas preocupaciones al cuerpo técnico, que deberá corregirlas para este miércoles cuando el Xeneize dispute la final de la Supercopa Argentina ante San Lorenzo.
Los que jugaron ayer hicieron trabajos regenerativos y posteriormente un fútbol reducido. A éste se sumó Daniel Osvaldo, que estaba trabajando en paralelo. El delantero confía en llegar en condiciones para el partido.
En otro sector del Complejo Pedro Pompilio, Cristian Erbes trabajó solo. El volante tiene para dos meses de recuperación.
Mañana continuarán los trabajos. Rodolfo Arruabarrena analiza si hará variantes. ¿Cambiará el esquema?