Juan Ramírez habló luego de la victoria de Boca en el Monumental ante River y expresó toda su felicidad por haber conseguido un triunfo que no solo trajo tranquilidad, sino confianza de cara a lo que viene.
Además, sostuvo que fueron merecedores y contó por dónde pasó la clave para imponerse en Núñez:
“Nos afianzamos en el resultado, ya con el 1-0 arriba, y River salió a buscarlo, dejándonos más espacios. Creo que después del gol nos sentimos mucho más cómodos en el partido”.
Respecto a su condición física, en la charla con ESPN blanqueó que arrastra una molestia en el tobillo, pero que no quiere salir:
“Desde que arranco el campeonato estoy con un esguince de tobillo, pero no quise parar. Llegué con lo justo al partido de River, quería jugarlo. Ahora, con estas dos semanas voy a recuperar y aflojará el dolor. Puedo jugar, pero después se me hincha”.
Sobre el cierre, le agradeció los elogios a Juan Román Riquelme y dijo:
“Me puso la vara alta. Viniendo de un jugador que le dio tanto al fútbol mundial, a uno lo pone muy orgulloso y con ganas de seguir mejorando”.